El 3 de abril de 1979 se celebraron las primeras elecciones municipales de la Democracia.
Casi un 66 por ciento de los madrileños formaron
largas colas a las puertas de los colegios electorales aquel 3 de abril de hace justo
cuarenta años, el día en que, por primera vez desde el fin de la dictadura, estaban llamados a elegir a sus representante políticos más directos. Tal día como hoy, en 1979, se celebraban las
primeras elecciones municipales democráticas, y lo hacían en un contexto que –salvando las indiscutibles distancias- guarda similitudes con el actual.
Este año, con las municipales y autonómicas fijadas para el 26 de mayo, el Gobierno de
Pedro Sánchez convocó elecciones generales, tras no lograr sacar adelante sus
Presupuestos, para el 28 de abril. En aquella recta final de los setenta, los madrileños también votaron para la
configuración de las Cortes Generales el 1 de marzo, poco más de un mes antes de volver a las urnas para elegir a sus representantes en el Consistorio –los gobiernos autonómicos no se eligieron en las urnas hasta un año después, en 1980-.
En esas generales de marzo del 79, el panorama político nacional no cambió en exceso con respecto a los resultados de los
comicios constituyentes del 77: la UCD de
Adolfo Suárez consiguió una mayoría holgada y el PSOE se consolidó como la gran alternativa, sentando las bases del
bipartidismo, que se perpetuaría hasta 2015, con la irrupción de otras fuerzas políticas. Sin embargo, esos dos años de la Legislatura constituyente española, con la ratificación en
referéndum de la Constitución mediante, sí supusieron un importante vuelco en el mapa municipal.
Aunque la UCD seguía siendo el partido más votado en los municipios españoles (30,6 por ciento), el PSOE le pisaba los talones (28,2 por ciento) y logró, con el apoyo de los comunistas (13 por ciento), un Gobierno de izquierdas en las principales ciudades españolas, como
Barcelona, Valencia, Sevilla, Zaragoza, Málaga y, también, Madrid.En el Ayuntamiento de Madrid, tanto
UCD como PSOE obtuvieron 25 escaños, mientras que el
PCE logró 9 concejales, que apoyaron a los socialistas para erigir, el 19 de abril, a
Enrique Tierno Galván alcalde de Madrid.
Las municipales del 79 terminaron con los últimos eslabones del régimen franquista que quedaban en las instituciones y permitieron a los ciudadanos elegir, por sufragio universal, a sus representantes más cercanos. Así, estos comicios se convirtieron en un acontecimiento clave para la consolidación y la libertad del régimen democrático.
De hecho, en 2009, para celebrar el treinta aniversario de estas elecciones, el Pleno Municipal de la Ciudad de Madrid aprobó una
iniciativa para reconocer esta fecha clave de la historia madrileña. Unos comicios que “abrieron el camino de la normalización democrática en España y a la vertebración política de la sociedad española”, según el texto presentado de forma conjunta por todos los grupos en el Consistorio.
“La masiva participación electoral en la jornada,
supuso el mejor espaldarazo al cambio político y al deseo de inaugurar una nueva etapa democrática en la historia de España. La constitución de los primeros ayuntamientos fue una fiesta de la libertad y de la democracia que demostró la madurez de la sociedad española”, añadía la declaración aprobada hace ahora diez años.