En la Comunidad de Madrid existen 23 humedales inscritos en el catálogo oficial de la Consejería de Medio Ambiente, el mismo número desde 2004. Hace poco menos de dos años, en abril de 2020, la Administración regional creó el Plan de Actuación de Humedales Catalogados para conservar, cuidar y ampliar dicho catálogo. Después de este tiempo de análisis y trabajo de campo, la Consejería ha identificado unas 573 masas de agua en la región que podrían pasar a tener una mayor protección si superan ciertos criterios medioambientales. Sin embargo, algunos Ayuntamientos cuestionan la validez del plan y desde organizaciones como Ecologistas en Acción critican los plazos del Gobierno regional y aseguran que la inclusión de nuevos humedales en el catálogo no garantiza su protección debido a la insuficiencia de los recursos invertidos.
El planeta celebra este miércoles el Día Mundial de los Humedales y por primera vez con el respaldo de la Naciones Unidas. Esta fecha, el 2 de febrero, conmemora la primera Convención sobre los Humedales, llevada a cabo en Ramsar, Irán, en 1971. La ONU autoriza esta efeméride de forma como gesto de compromiso ante la crisis climática que poco a poco va carcomiendo el medio ambiente debido al enorme volumen de contaminación provocado por la actividad industrial y por la concentración de la población en grandes urbes que incrementan las emisiones nocivas a la atmósfera, entre otros graves problemas. En este contexto, los humedales y lagunas suponen un elemento muy importante en la conservación de la biodiversidad.
España es el tercer país del mundo que más humedales conserva dentro de sus fronteras, aunque según organizaciones como WWF, hasta un 60 por ciento de estos entornos han desaparecido en los últimos 40 años. Madrid, por su parte, tiene en su territorio unos 23 humedales totalmente identificados y mantiene la intención de aumentar esa cifra, a pesar de las críticas. Según fuentes de la Consejería de Medio Ambiente, cuya titular es Paloma Martín, la postura de Ecologistas en Acción no está fundada en la realidad. La inclusión en el catálogo oficial sí garantiza un grado de protección muy importante gracias al Plan de Actuación que está dotado con unos 11 millones de euros que se invertirán en un plazo de 10 años, es decir, hasta el 2030.
Ecologistas critican la gestión
El hecho de que no se haya añadido ningún humedal más en el catálogo oficial de la Comunidad de Madrid en los últimos 18 años hace desconfiar a Ecologistas en Acción: "Creemos que esto es una promesa y veremos si alguna vez se cumple; ya hemos visto que el interés del Gobierno en los humedales es prácticamente nulo, para nosotros no tiene ninguna credibilidad". Para Raúl Urquiaga, portavoz de la organización en Madrid, el estado de conservación de los 23 humedales catalogados es muy mejorable. Asegura que hay humedales que se han degradado por falta de inversión y de medidas para evitar que especies exóticas invasoras dominen estos pequeños ecosistemas que, entre otras muchas características, destacan por su vulnerabilidad. Un ejemplo de esta degradación, apunta Urquiaga, es la Laguna del Campillo, en Rivas, o la Laguna de la Esperilla, en Arganda del Rey, donde se han llegado a dragar en los últimos años hasta 12 coches que habián sido arrojados al agua.
"La inclusión en el catálogo no garantiza protección"
Sostiene este portavoz que la inclusión en el catálogo de la Consejería de Medio ambiente "no garantiza la protección de los humedales" y señala a la insuficiencia del Plan de actuación aprobado por el Gobierno de la Comunidad de Madrid en 2020. "Llevamos desde 2018 oyendo que se van a incluir más humedales", lamenta Urquiaga a la vez que defiende que estos lugares naturales suponen el hábitat de decenas de especies animales que dependen de la buena salud de las aguas y de la flora para sobrevivir. Además, critica que aquellas lagunas o humedales que se quedan fuera del registro están "totalmente olvidados y abandonados".
La Comunidad se defiende
Frente a esta visión, se erige la Consejería de Medio Ambiente con unos datos y una perspectiva totalmente diferente. En primer lugar, desde la Administración regional rechazan que el estado de los humedales sea tan negativo como critica Ecologistas en Acción. Para Luis del Olmo, Director General de Biodiversidad y Recursos Naturales, la Comunidad de Madrid reconoce y protege "estos enclaves que aportan una enorme riqueza a la biodiversidad por su variedad de anfibios, aves y reptiles, así como la flora que surge en torno a ellos; y damos un fuerte impulso a su conservación y ampliación con un Plan de Actuación a diez años, dotado con once millones de euros".
Según fuentes de la Consejería, todos los humedales de la región, los que están incluidos en el catálogo oficial y los que no, están supervisados por los técnicos medioambientales y están sometidos a diversas actuaciones. De hecho, en las masas de agua que no están incluidas en el catálogo, se llevan a cabo medidas como la erradicación de las especies invasoras que colonizan algunos de estos ecosistemas y que ponen en riesgo su equilibrio natural.
Por otro lado, en cuanto a los humedales reconocidos, destacan labores como el seguimiento de la calidad de las aguas y del estado ecológico, las obras de mejora de la biodiversidad de la Laguna de San Juan, en Chinchón, y las obras de restauración y mejora de la biodiversidad llevadas a cabo en las Lagunas de El Sotillo y Picón de los Conejos, en el Velilla de San Antonio.
En el primer caso, las actuaciones han consistido en la recuperación del vaso lagunar, que se encontraba en riesgo de desaparecer debido al alto grado de colmatación por sedimentos, mediante un dragado ejecutado con maquinaria anfibia especializada. En cuanto a las actuaciones llevadas a cabo en las lagunas del Sotillo y Picón de los Conejos, han consistido en la demolición de unas infraestructuras en desuso procedentes de la antigua explotación minera llevada a cabo hace décadas. Además, se ha adecuado una de las estructuras, una caseta de transformador ya en desuso, para la acogida de diversos tipos de fauna como murciélagos y aves.
Aparte, se están realizando otras mejoras en otros siete humedales catalogados, situados en los municipios de Arganda del Rey, Valdemanco, Hoyo de Manzanares, Aranjuez o Velilla de San Antonio, entre otros. Estas actuaciones consisten, según estas fuentes, en la restauración de suelos degradados, la reforestación de los entornos perilagunares, la mejora de los equipamientos de uso público y la mejora de cerramientos, caminos y vías de acceso.

Rivas critica la "nula coordinación" con la Consejería
En el caso del Ayuntamiento de Rivas, la concejala de Transición Ecológica, Vanessa Millán, entiende que la inversión que haga la Comunidad en la zona para la protección de los humedales es "muy necesaria" pero que la coordinación con las administraciones es "fundamental". "Somos los titulares de Las Lagunas y la coordinación con nosotros es nula, no la hay. Hemos tenido reuniones con los conservadores del parque nacional, pero con la Comunidad no", lamenta.
La concejal de este municipio quiere que se trabaje coordinadamente en el tema de los vertidos, algo "fundamental para toda la recuperación de las zonas" y esta coordinación con el Gobierno regional, a pesar de que dice ser "bastante inexistente" asegura que intentará que se pueda mejorar.
"La coordinación con la Consejería es nula"
Solo así, considera que podrán adaptar su presupuesto y actuar en coordinación para dar una mayor protección a los humedales. Además, critica la recién aprobada 'Ley Ómnibus' que deja "muy a la ligera la profesión de la natutaleza y de el medio ambiente". Millán relata que en el municipio de Rivas existen tres humedales en estado de protección: el de La Laguna del Campillo, Soto de las Puntas y la Laguna de la Vega del Porcal. Todos ellos tienen "una gran riqueza geológica, ambiental y están vinculados hasta las cuencas del río Jarama y Manzanares".
"Son la joya de la corona, nuestra joya. Queremos poner en valor nuestra zona y nuestros humedales, porque tienen muchas afecciones. El último informe de la Comunidad dice que la calidad de las aguas son deficientes", expone. Es por ello que desde el Consistorio están trabajando en este ámbito y en reducir la presión que suponen las visitas al parque, para lo cual han controlado todo el acceso a las lagunas.
"Dejadez", definen en Arganda del Rey
Por su parte, el concejal de Medio Ambiente de Arganda del Rey, Jorge Canto, también coincide en que la situación en su municipio es de "dejadez". Según explica, la Laguna de la Esperilla y las Lagunas de las Madres son los humedales "más importantes" que tienen, ya que forman parte del Parque Regional del Sureste, de la Red Natura 2000 pues son zona ZEPA-zona de especial protección para las aves y se encuentran dentro del Catálogo de Humedales Protegidos de la Comunidad de Madrid. Esto se debe sobre todo a la avifauna invernante y nidificante, aunque también hay especies de flora acuática protegida, anfibios en situación vulnerable.
"Tenemos una situación de dejadez"
Al concejal, le "choca la cantidad de protección que tienen y lo poco se mantienen". "Hay gran cantidad de árboles secos, los caballos del picadero ilegal que se localiza dentro del recinto habían llenado de excrementos todo el camino principal que rodea la laguna y varios problemas más. En general una situación de dejadez", lamenta. En cuanto a la gestión de la Comunidad en los humedales del municipio, celebra que les hayan elegido junto a otros 6 humedales, de entre los 23 humedales catalogados de la Comunidad, para realizar obras de mejora. Con ellas, pondrán arbolado, bancos, casetas de murciélagos y rehabilitarán la última laguna del recinto de las Madres.
No obstante, en base a una valoración global, consideran que la gestión del Ejecutivo madrileño "no sería satisfactoria", ya que al ser un espacio protegido, por ejemplo, el tema del mantenimiento del arbolado "deberían realizarlo de manera periódica y han acudido muy pocas veces" y solo porque se lo han requerido "de mil maneras".

Los humedales del Macizo de Peñalara
La Convención sobre los Humedales es un tratado intergubernamental, firmado en Ramsar (Irán) en 1971 que reconoce la importancia de los humedales, como recurso de "gran valor económico, cultural, científico y recreativo", así como el carácter de recurso internacional de las aves acuáticas, debido a sus migraciones estacionales. De esta forma, el objetivo de la Convención nació para la acción nacional y la cooperación internacional para la conservación y uso racional de los humedales y sus recursos.
Ya en diciembre de 2005 y a propuesta del Ministerio de Medio Ambiente, el Consejo de Ministros adoptó un acuerdo por el que se autorizó la inclusión de varios humedales en la Lista de Humedales de Importancia Internacional del Convenio Ramsar, entre los cuales se incluyeron los Humedales del Macizo de Peñalara, situados en el término municipal de Rascafría. Este es el único entorno de la Comunidad de Madrid que se encuenta incluido dentro del Convenio Ramsar y que se mantiene en buen estado de conservación tras las medidas de gestión y restauración ecológica que se han llevado a cabo desde el Ejecutivo autonómico.
A pesar de ello, aún persisten algunas amenazas como "el exceso de uso público o la presión generada por un exceso de población de la cabra montés". No obstante, sus efectos se mantienen con bajos niveles de intensidad gracias a los trabajos desarrollados por la Dirección General de Biodiversidad y Recursos Naturales a través del Parque Nacional.
Además, se ha controlado una enfermedad fúngica (quitridiomicosis), descubierta en 1997, que se puede considerar actualmente como controlada, debido a los trabajos de conservación, traslocación y cuidado de algunas especies de anfibios en el Centro de Cría en Cautividad de Anfibios Amenazados, que está mitigando el riesgo de extinción local de las poblaciones afectadas por la enfermedad.