En materia de Educación, el año 2017 deja deberes en la agenda de 2018. Algunos, porque quedan pendientes; otros, porque tocará llevar a la práctica la teoría aprobada. Sucederá, por ejemplo, con la modificada ley de gratuidad de libros de texto y material curricular impulsada por Ciudadanos (Cs), que, gracias a un sistema de préstamo, facilitará que los padres de la región no tengan que desembolsar dinero en la compra de los manuales de sus hijos a partir del próximo curso.
Un año escolar que los sindicatos desean que comience en mejores circunstancias que el actual. Obras, barracones y el traslado de alumnos entre centros marcaron la vuelta al cole de 2017: tanto fue así que CCOO dibujó en Madridiario la radiografía del estado de las construcciones en la comunidad. Unos meses antes, en junio, la Consejería de Educación y los sindicatos habían firmado la ‘Aprobación del acuerdo sectorial para la mejora de las condiciones de trabajo de los funcionarios docentes’.
Y no fueron esas las únicas negociaciones que ha habido que abordar este año: en noviembre debía empezar a tomar forma el ‘Acuerdo por la Educación Madrileña 2017-2020’. Gobierno regional y organizaciones sindicales se sentaron a hablar, pero poco han avanzado. Deberes para 2018.
Con todo eso pendiente, el gran ‘gol’ educativo lo ha metido Cristina Cifuentes, que, tras un año de negociación, 60 reuniones y 10 meses después del primer borrador, logró presentar, al fin, la Ley del Espacio Madrileño de Educación Superior, ‘su’ LEMES, la primera ley de universidades regional y una de las medidas estrella del PP para la actual legislatura. Si el final de año se presta a balances, parece buen momento para recordar qué gastos relacionados con la escolarización podrá deducir en la próxima declaración de la renta. Y recordar, para nunca olvidar, cómo se detecta el ‘bullying’ en casa. Para que 2018 sea un año libre de acoso escolar. Ojalá.