Muere la beata Mariana de Jesús, santa patrona de Madrid

Tal día como hoy, hace 395 años, murió María Ana Navarro de Guevara y Romero. Más conocida como la beata Mariana de Jesús, se trata de una de las santas patronas de Madrid.

Nació en la capital el 17 de enero de 1565, en una familia acomodada. Desde joven, quiso embarcarse en la vida religiosa e ingresar en un convento, algo que le generó algunos enfrentamientos con su familia. El origen de estos enfrentamientos era que ya le tenían concertado el matrimonio con un hombre, pero no llegó a llevarse a cabo.

En el año 1598 se retiró a la ermita de Santa Bárbara, donde fue su director espiritual fray Juan Bautista del Santísimo Sacramento. De esta manera, se dedicó a la oración y penitencia, además de ayudar a aquellos que lo necesitaran.

Su fama se extendió con facilidad por distintas razones, entre las que se encontraban sus virtudes. Las apariciones sobrenaturales y milagros que la rodeaban llamaron la atención de multitud de personas en Madrid, experiencias que la propia Mariana de Jesús recogió en distintos escritos.

En esas publicaciones, la beata hablaba de sus visiones de Jesucristo y la Virgen María. De hecho, aunque estas experiencias le aportaron una cierta fama, fue algo que aumentó tras su muerte el 17 de abril de 1624.

Años después de su muerte, el 31 de agosto de 1627, se abrió su sepultura y sucedió un hecho sorprendente. A pesar de haber pasado ya tres años de su fallecimiento, el cuerpo de Mariana de Jesús se encontraba intacto y sus miembros aún eran flexibles. Había muerto de una afección pulmonar a los 59 años y aquel hecho carecía de explicación por parte de los presentes. De hecho, ha sido inspeccionado en 1731, 1924 y 1965.

El proceso de beatificación de Mariana de Jesús comenzó el mismo año de su muerte y fue declarada beata por el papa Pío VI el 18 de enero de 1783. Asimismo, fue declarada copatrona de la ciudad por el Ayuntamiento de Madrid, junto a san Isidro Labrador.