El 26 de diciembre de 1925 se inauguraba la que sigue siendo la línea más corta de toda la red de Metro de Madrid: el Ramal Ópera-Príncipe Pío.
Entre los 294 kilómetros de red que tiene el Metro de Madrid, existe una línea que presta servicio a lo largo de un kilómetro y que solo para en dos estaciones. Inaugurada el 26 de diciembre de 1925, el Ramal Isabel II-Norte –hoy Ramal Ópera-Príncipe Pío– fue oficialmente la tercera línea de metro construida por la Compañía Metropolitano Alfonso XIII.
Ante la gran afluencia de viajeros que pasaban por la Estación del Norte, los ciudadanos reclamaban una conexión con alguna de las dos líneas de metro existentes (La 1, de Puente de Vallecas a Cuatro Caminos y la 2, de Ventas a Quevedo).
En 1924 la empresa constructora obtuvo la concesión mediante Real Orden, pero el tortuoso trazado desde la Estación del Norte hasta la Plaza de Isabel II provocó varios quebraderos de cabeza, viéndose agravados los problemas de cimentación que ya arrastraba el Teatro Real.
Tras el día de Navidad de 1925, se inauguró la primera conexión de la Estación del Norte con el resto de la ciudad y la estación de Isabel II comenzó a compartir con la de Sol la responsabilidad de albergar dos líneas diferentes de metro.
Interrumpido el servicio a causa de la guerra
Durante la Guerra Civil, el metro fue utilizado a modo de refugio y como fábrica de municiones por el ejército republicano. La parada ‘Lista’ (Línea 2) quedó arrasada en 1938 tras una detonación.
El Ramal, al encontrarse cercano al frente, fue la única línea que se cerró al transporte de viajeros, tropas, armamento, mercancías y cadáveres.