Con el nuevo cubo gris de tapa marrón Madrid se suma a la recogida separada de los residuos orgánicos. Es decir, el quinto contenedor completa el círculo del reciclaje: en él acaba lo que no se deposita en el azul (papel y cartón), en el amarillo (envases de plástico, metal y tetrabriks), en el verde (vidrio) o en el de tapa naranja, que quedará para los restos no reciclables.
¿Qué residuos hay que tirar en el contenedor de tapa marrón?
Al nuevo contenedor de basura orgánica, el de tapa marrón, irán los restos de fruta, verdura, carne, pescado y otras comidas; cáscaras de huevo, marisco y frutos secos; posos de café e infusiones; papel de cocina sucio y servilletas usadas; tapones de corcho, cerillas, serrín y pequeños restos de jardinería, como ramos de flores, plantas u hojarasca. La recogida será diaria.
¿Cuál es la diferencia con el cubo de tapa naranja?
La llegada del cubo marrón implica la recogida separada de los residuos orgánicos reciclables. A partir de ahora, y según los expertos, nos daremos cuenta de que casi todo lo que iba al naranja irá al marrón. Casi todo... hay excepciones: el cubo de tapa naranja queda ahora para los restos no reciclables. Es decir, en él se tirarán chicles, compresas, pañales, toallitas húmedas, colillas, arena de gato, excrementos de animales, pelo y polvo de barrer.
¿Por qué hay contenedores con llave?
Sí, lo ha leído bien, y en la foto superior puede apreciarlo. Uno de los cinco modelos de contenedor marrón instalados en Madrid tiene llave: "Es un proyecto piloto dentro del piloto", señalan desde el Área de Medio Ambiente y Movilidad. Ha sido instalado en el barrio de Apóstol Santiago, en Hortaleza, donde cada casa tiene su propia llave: siempre estará cerrado, así que solo se podrá abrir con ella. "Probablemente se recogerá menos cantidad, pero será más 'puro', es decir, tendrá menos impropios". Eso es lo que espera Víctor Sarabia, director general del Servicio de Limpieza y Residuos del Ayuntamiento de Madrid. Y eso es lo que quiere comprobar el Consistorio: ¿se recoge menos pero mejor?
¿Cuáles son los beneficios del quinto cubo?
Todo tiene un porqué, y la llegada del contenedor de tapa marrón a Madrid también. De hecho, hay varios motivos que justifican su implantación en la capital, razones que se resumen en ventajas ambientales y requerimientos legales. Por ejemplo, con los residuos orgánicos se obtendrá biogás y fertilizante natural para las plantas. Además, se mejorará la recogida selectiva de los demás residuos y se aumentará la vida útil de los vertederos: tardarán más en llenarse y se reducirán los malos olores.
Asimismo, el Ayuntamiento tiene previsto que esta nueva recogida se traduzca en más puestos de trabajo, tanto en las rutas del servicio como en las plantas de biometanización y compostaje para su tratamiento. A todo ello se suma la hoja de ruta de la UE, que ha fijado dos objetivos para 2020: rebajar un 20 por ciento los residuos que se generan y alcanzar el 50 por ciento de residuos preparados para la reutilización y el reciclaje. "Vamos con retraso", diagnosticó la delegada de Medio Ambiente y Movilidad, Inés Sabanés, durante la presentación del contenedor marrón.
¿Dónde están los contenedores de tapa marrón?
Este martes comienza un plan de implantación progresiva que en su primera fase llega a 255.000 habitantes de 125.000 viviendas localizadas en Vallehermoso (Chamberí); Cuatro Caminos y Almenara (Tetuán); Casa de Campo, Argüelles y Ciudad Universitaria (Moncloa-Aravaca); Quintana (Ciudad Lineal); Salvador y Las Rosas (San Blas-Canillejas); Apóstol Santiago y Pinar del Rey (Hortaleza); Numancia Portazgo (Puente de Vallecas); Puerta del Ángel y Campamento (Latina); Los Rosales y Butarque (Villaverde), y Palos de Moguer, Acacias, Chopera, Delicias, Legazpi y Atocha (Arganzuela).
Además, se han dispuesto 50 contenedores en grandes generadores de residuos: 15 centros comerciales, 11 mercados, ocho hospitales, dos hoteles, la sede de RTVE en Torrespaña, las estaciones de Atocha y Chamartín, Mercamadrid, el distrito Telefónica y dos cuarteles del Ejército.
El objetivo del Ayuntamiento, según Sabanés, es que el proyecto "esté implantado en toda la ciudad al final de la legislatura". No obstante, recuerda, "el horizonte que fija la Unión Europea" para cumplir con las exigencias comunitarias "es 2020".