El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha denegado al grupo municipal de Vox la medida cautelarísima solicitada para suspender la nueva ordenanza de movilidad aprobada en el Pleno de Cibeles con los votos de PP, Cs y Grupo Mixto.
La Sección Segunda rechaza así la medida cautelar solicitada por Vox, de suspensión de los acuerdos del Pleno del Ayuntamiento de Madrid, de 13 de septiembre pasado, en los se aprobó la nueva ordenanza de regulación del tráfico en el centro de la capital.
Los magistrados toman esta decisión tras "no advertir la especial urgencia que exige el artículo 135 de la Ley jurisdiccional, presupuesto esencial habilitante (para adoptar la medida), sobre el que el recurrente tampoco hace (en su escrito) una específica y fundada consideración, al limitarse a hacer una genérica referencia a que el próximo 1 de enero de 2022 ya empiezan las restricciones contempladas en la ordenanza".
Los jueces entienden que no existe urgencia como para adoptar una medida cautelarísima (en la que no se escucha a las partes), al haber por delante tiempo suficiente para sustanciar "una pieza separada de medidas cautelares en la que se dé audiencia a la administración", a la que se emplaza para que se pronuncie en el plazo de los próximos diez días.
Vox presentó la solicitud de cautelarísimas por "tres razones políticas, por engaño y mentira; por razones de ilegalidad y por razones de injusticia social".
"Una traición a los madrileños, que dijeron 'no' al comunismo en Madrid". Así calificó la orgenanza el líder municipal de Vox, Javier Ortega Smith. "Al señor Martínez-Almeida se le llenaba la boca en las elecciones diciendo 'comunismo o libertad' pero nos ha dejado claro que está con los comunistas y no con la libertad de movimientos, económicos y de tener el coche que al ciudadano le dé la gana", subrayó.