09/10/2013@07:30:00
De sobra es conocido que la crisis ha provocado una bajada generalizada del precio de las viviendas, tanto para comprar como para alquilar, independientemente de que sean nuevas o usadas. A esta rebaja general, sin embargo, parecen ajenas las administraciones públicas, pues mantienen los precios de las viviendas protegidas. Como resultado muchos de sus inquilinos renuncian a las adjudicaciones.