Desde abril, un gran grupo de personas 'sin techo' lleva acampando en diversos lugares de Madrid con un mismo propósito: ejercer su derecho a una vivienda digna. Comenzaron su protesta frente al Ministerio de Sanidad, después se trasladaron ante el Ayuntamiento de la capital, en Cibeles, donde se produjeron diversos altercados que llevaron al portavoz de este grupo, Miguel Carrera, al calabozo.
Ahora, se han dividido para hacer más fuerte su presencia y un total de cinco tiendas se instalaron ayer, sábado, frente al Congreso de los Diputados. Alrededor de las 22:00, un grupo de 'sin techo' armó su pequeño campamento allí, con vistas a permanecer hasta que el decreto que registraron el pasado 9 de septiembre se apruebe.
"No hemos recibido todavía ningún tipo de respuesta por parte de ningún político", destaca Miguel Carrera, portavoz y cara visible de la acampada. "Necesitamos presionar con urgencia para evitar que, si el 23 de septiembre disuelven las Cortes, nos dejen todo el invierno en la calle", apunta.
Carreras hace hincapié en la urgencia de aprobar este decreto: "El decreto está redactado en base a decretos equiparables ya aprobados. El señor presidente Sánchez y los señores y señoras diputados/as tienen una responsabilidad institucional y todos ellos han jurado la Constitución, que en su artículo 53 vincula a todos los Poderes Públicos con la protección de los Derechos Constitucionales como reivindicamos (Art. 15CE, Art.18CE, Art. 17CE)".
Una acampada motivada por una vigilia
El grupo de 'sin techo, con derechos' organizó para este sábado una vigilia en memoria de todas las personas que han fallecido en la calle. Después de unas jornadas que organizaron varios colectivos, decidieron montar varias tiendas para informar acerca de este evento.
Con la lluvia cayendo, decidieron llamar al Samur Social para solicitar asilo, pero su petición fue denegada, por lo que decidieron quedarse a dormir en las tiendas que habilitaron para la vigilia. "Estamos en la calle. Nos da igual dormir en la Plaza de las Cortes que en la Plaza de Jacinto Benavente", comenta.
Esta madrugada han vivido un momento de tensión, puesto que agentes de la Policía Nacional y Municipal les han multado por encontrarse allí, aunque no han sido desalojados. Uno de los acampados en el Congreso comenta a Madridiario que se asustaron, ya que pensaban que la cuantía de esta multa iba a ser abultada, pero ascendió solo a 30 euros. "En un momento dado nos reímos. 30 pavos duelen, pero pensabamos que serían 300 o 400. Prefiero pagar los 30 euros y seguir luchando", destaca.
"Están muriendo personas en las calles de España"
El portavoz de los 'sin techo' se ha trasladado también a 'vivir' a este punto para reclamar más de cerca a los políticos del Congreso una mayor implicación en materia de vivienda y políticas sociales.
"Llevamos cinco meses y medio protestando frente al Ministerio de Política Social y desde ayer, 14 de septiembre, también estamos en la puerta del Congreso para que el señor Pedro Sánchez y los señores diputados no puedan mirar para otro lado y aprueben cuanto antes el decreto que el presidente tiene en la mesa de su despacho y que necesitamos urgentemente para que no mueran más personas sin hogar y que nuestros derechos fundamentales se vean protegidos y respetados en todo momento", ha destacado a Madridiario, Carrera.
Ha añadido que esta acampada no se va a levantar hasta que no vean su objetivo cumplido: vivir bajo un techo digno. "Señores diputados, señor Sánchez, no nos vamos a mover de aquí hasta que ustedes firmen el decreto que necesitamos. Están muriendo personas en las calles de España. No miren a otro lado. Son derechos fundamentales que deben estar protegidos al máximo nivel según dice la Constitución", ha sentenciado el portavoz.
Problemas con La Vuelta
En el Paseo del Prado, también se han vivido momentos de incertidumbre, puesto que La Vuelta Ciclista a España pasará este domingo por allí y esta madrugada, la organización ha comunicado que los acampados debían desalojar la zona.
Finalmente, han sido cercados al comenzar las labores de montaje de las diferentes estructuras y permanecen en el mismo lugar, aunque temen que el público entre en su acampada y puedan robar los pocos enseres que poseen.
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