La conexión peatonal entre la estación de Cercanías de
Sol y la del Metro de
Gran Vía se podrá utilizar a partir a mediados del año que viene. Así, al menos, se deduce del contrato de licitación de las obras que empiezan este martes y que cuentan con un presupuesto de más de tres millones de euros y de un plazo de ejecución de nueve meses. Los trabajos, que no son complejos, beneficiarán a unos
22.000 viajeros diarios.
De esta forma, mientras la empresa del Estado ejecuta estas obras, la
Comunidad y
Metro siguen llevando a cabo las obras de ampliación de la estación del suburbano, donde instalarán un templete
similar al de Antonio Palacios.
Una obra ya comenzadaEntre ambos lugares
existe ya una galería de una longitud de 100 metros y un ancho de 5,5, salvando un desnivel de 12 metros. De esta galería, que discurre bajo la calle Montera, se ha ejecutado únicamente la estructura, quedando a la vista el hormigón de las bóvedas. Las obras que ahora se inician consisten fundamentalmente en dotarla de los acabados e instalaciones necesarias para su uso por parte de los viajeros.
Asimismo, se revestirán las paredes y techos con
materiales antivandálicos y se montarán las instalaciones de
protección contra incendios (ventilación, detección, extinción y alarma). Además, se instalarán cuatro rampas mecánicas para salvar el desnivel existente entre ambas estaciones.
Al mismo tiempo, se dotará a la estación de todas las instalaciones necesarias para su funcionamiento:
iluminación, señalización, información al viajero, redes de comunicaciones, etc. En el vestíbulo previo a la conexión de la galería se creará un nuevo control de acceso con tornos y maquinas autoventas.