Durante su visita al barrio de Lavapiés, una decena de personas han increpado a Manuela Carmena con pancartas que pedían un barrio "migrante y antirracista". La alcaldesa no ha dudado en acercarse a hablar con los manifestantes.
Una decena de personas han increpado a la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, por un Lavapiés "migrante y antirracista" a su llegada al Teatro Valle Inclán, en este barrio, donde se encuentra esta mañana reuniéndose con representantes de varias entidades vecinales.
Carmena ha sido recibida por una decena de personas que portaban carteles con lemas como 'poder racializado organizado' o 'España será antirracista o no será'.
La alcaldesa se ha parado a hablar unos segundos con los manifestantes tras recorrer parte de Lavapiés, con paradas en una asociación bamgladeshí y en una mezquita, entre otras. Tampoco ha dudado en posar ante las peticiones de selfies que se le han presentado a su paso, incluida una novia de una despedida de soltera.
Críticas de la oposición
Poco antes, la portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Madrid, Begoña Villacís, sostenía que la visita de la alcaldesa al barrio "llega tarde", ya que se produce dos meses después de los incidentes que tuvieron lugar tras el fallecimiento del senegalés Mmame Mbaye.
En declaraciones a los medios de comunicación, Villacís ha recordado, respecto a lo sucedido en el distrito, que los concejales del equipo de Gobierno "se comportaron de una manera absolutamente irresponsable" porque, a su parecer, "conociendo toda la información permitieron que la gente que iba a recibir a los policías pensasen que eran unos presuntos asesinos racistas". "Me parece gravísimo", ha dicho. Asimismo, ha hecho hincapié en que "el ambiente se caldeó muchísimo" y los policías tuvieron que ver "como se les tiraban adoquines y sillas". Según la portavoz de Ciudadanos, el Ayuntamiento en vez de "salir a declarar todo lo que sabían dejo que pasase un día" mientras que la alcaldesa dejo que pasasen "cinco" para salir a decir que "sus chicos se habían comportado bien".
Villacís ha incidido de que se trata de una forma de actuar "absolutamente distinta" de lo que esperan los madrileños. "Han tenido que pasar casi dos meses para que se presente en Lavapiés. Esto es muy tarde. Gobernar exige reacción e inmediatez", ha expuesto.
Por su parte, el portavoz de PP, José Luis Martínez-Almeida, ha incidido en que Carmena tiene que pedir disculpas a los vecinos y comerciantes de Lavapiés por su "irresponsable" actuación cuando se produjeron los disturbios tras la fallecimiento Mbaye. Martínez-Almeida ha señalado que la visita no puede ser "un ejercicio de buenismo" sino que tiene también que pedir perdón por haber tardado "más de dos meses" en acudir. Asimismo, ha pedido además a la alcaldesa que les diga a los vecinos y a los comerciantes "que va a cesar inmediatamente a la (concejala de Ahora Madrid) Rommy Arce por decir que la Policía Municipal actuó con racismo institucional".