Las políticas de inversión nos han permitido generar un diferencial de paro siete puntos mejor que la media estatal. Eso se ha producido gracias a inversiones productivas en infraestructuras, en polígonos industriales, en viveros de empresa... Tenemos que continuar con una prioridad clara. Todas las políticas que hagamos tiene que buscar el aumento del empleo. Como ejemplo, la gente piensa que cuando invertimos en contenedores culturales, solo ampliamos la oferta cultural. Es verdad, pero hay mucho más. También supone un incremento del 50 por ciento del número de turistas en Madrid. Tres millones más de visitantes son los responsables de que haya más de 190.000 madrileños trabajando. Facilitar el camino a los emprendedores y las pequeñas empresas es crucial. Así como apostar por los sectores estratégicos y reducir las trabas burocráticas.

En un distrito del sur de Madrid.
Esta legislatura ha incluido la iniciativa privada en las políticas municipales ¿Qué peso va a tener en su nuevo proyecto para Madrid?
Vamos a cooperar siempre con los agentes sociales: empresarios y sindicatos. En una sociedad moderna, lo que tiene que hacer un Gobierno es convocar a todos los actores y, evidentemente, un actor fundamental en la creación de empleo es el empresario. Este tiene que saber que Madrid es el espacio más inteligente para localizar su inversión.

Desgraciadamente, no será en la próxima legislatura. Antes de que pasen 4 años va a ser difícil conseguirlo.
Eso va a suponer una merma en la recaudación municipal.
Supondrá una merma en función de la coyuntura económica. Si conseguimos dinamizar la economía de Madrid, sin subir los impuestos, se puede aumentar la recaudación. Ese es nuestro objetivo.
Explíqueme cómo la revisión del catastro es culpa del Gobierno si beneficia al Consistorio y ustedes pueden variar su coeficiente municipal.
El catastro es una decisión del Gobierno de España y el Ministerio de Hacienda. Por tanto, son ellos los que toman la decisión sobre su revalorización. No sabemos qué valoración catastral va a hacer el ministerio. Subir este impuesto lo vamos a tener que subir. Pero la decisión es únicamente estatal.

Fundamentalmente, hay que dinamizar la economía, apostar por sectores estratégicos y tener muy claro que tenemos que seguir captando inversión. Sobre todo, inversión extranjera. En estos momentos, somos la ciudad líder en creación de empresas y en inversión extranjera. Ese liderazgo lo tenemos que incrementar.

No lo creo. Lo sé. Hoy Madrid es una ciudad más equilibrada que hace ocho años. Tenemos los índices de renta familiar disponible de 2003 y de ahora. Aseguro que los distritos que menos tenían son los que más han crecido y que, por lo tanto, las diferencias se han reducido en niveles de renta y de desempleo. Todos los distritos de la ciudad tienen una tasa de paro inferior a la media nacional.

Sin duda, la Cañada Real es un problema que afecta a cinco municipios. Creemos que el discurso a seguir es el que defiende las políticas sociales. Ver la Cañada Real como un problema urbanístico es un error. Incluso verlo como un problema de orden público, también es un error. Si se aplica un plan social liderado por la comunidad autónoma, colaboraremos los ayuntamientos.

Hay algunos proyecto que hemos aplazado. Cuando estalló la crisis nos pusimos el objetivo de no hacer ni un recorte social. Eso supuso aplazar algunos proyectos, sin duda, buenos para la ciudad. pero que deben esperar a que superemos la crisis. Pienso en el centro internacional de convenciones o en el estadio de Vallehermoso. Son infraestructuras que tendremos cuando la crisis se haya superado.
Su política del tráfico en el centro está acorralando al coche, entre peatonalizaciones, carril bus y carril bici. Sin embargo, los coches siguen entrando al centro ¿No cree que la estrategia de disuasión puede llevar al colapso?
No. Las restricciones que se están estableciendo, o bien peatonalizando, o bien reservando las zonas para uso exclusivo de los vecinos, lo que hacen es disuadir a los ciudadanos que vienen de fuera de Madrid con el vehículo privado. Prueba de ello es que, con todas las peatonalizaciones que hemos hecho, junto con las áreas de prioridad residencial, se ha ampliado la velocidad media de circulación por Madrid.

La experiencia de las áreas de prioridad residencial de Las Letras y Las Cortes es positiva. La peatonalización es válida en determinadas calles. Lo hemos hecho en Fuencarral, en Montera, en Arenal, en la plaza de Ópera. Pero hay otras en las que el efecto que buscamos es que el peatón sea protagonista de la ciudad y, a la vez, reducir el impacto de la contaminación. Eso se consigue con áreas de prioridad residencial que restringen el tráfico para todos excepto para los propios vecinos. No se puede pensar que una ciudad tan compleja como Madrid necesita las mismas fórmulas y soluciones para todos sus barrios. Cada uno debe de tener un tratamiento específico.

Hemos pedido que todas las prestaciones que realiza la ciudad de Madrid, que por no ser competencias propias no están financiadas, tienen que estarlo. Por lo tanto, la obligación de la regulación de la financiación es al Gobierno de España. Esa es la razón por la que nos dirigimos al Gobierno de España. La Comunidad de Madrid no puede modificar la Ley de Haciendas Locales. Pero, evidentemente, hace una falta una revisión de la financiación para que todas aquellas prestaciones de índole social, de educación o seguridad, por ejemplo, que, siendo responsabilidad de otras administraciones, hace el Ayuntamiento, tengamos una financiación para poder abordarlas.
Usted promete mantenerse en el Ayuntamiento la próxima legislatura. Eso no quiere decir que no pueda desempeñar otras funciones. Si gana, ¿va a compatibilizar en los próximos 4 años el cargo de alcalde con el de diputado?
Ya pedí una vez ser diputado y ese error no lo voy a volver a cometer.

Un partido político es difícil que te ofrezca algo que ni siquiera pides tú.
¿Cree que la deuda municipal y su enfrentamiento con Zapatero pueden pasarle factura electoral?
Yo creo que los madrileños juzgan nuestra gestión por los resultados. Van a evaluar si estamos mejor que hace cuatro y ocho años. Con toda sinceridad, creo que hemos mejorado, y mucho.

Creo que cualquier manifestación debe ser vista con respeto e interés. Le animo, sin embargo, a que participen en el sistema democrático. Porque el mayor regalo que tiene el ser humano es poder vivir en democracia. No deberían sostener ese discurso de negativa a acudir a las urnas. Si ninguna de las formaciones políticas les satisface deben tomar ellos la iniciativa de crear una formación política que concurra democráticamente a las elecciones y, por último, que no confundan el fracaso de un gobierno, en relación con el problema del desempleo, con el fracaso del sistema. En España no ha fracasado el sistema democrático. Lo que ha fracasado es el gobierno socialista.