El pasado miércoles, 16 de junio, la Consejería de Sanidad anunciaba que la Gerencia Asistencial de Atención Primaria de la Comunidad de Madrid procedería este lunes, 21 de junio, al traslado de los 24.000 usuarios del Centro de Salud Villaamil –sito en la calle del mismo nombre, en el distrito de Tetuán– al Centro Doctor Castroviejo, en la calle Cándido Mateos, aproximadamente a media hora caminando.
¿El problema? El centro de salud, en régimen de alquiler, se encuentra en la planta baja de una comunidad de vecinos, cuyo primer piso lo habitan okupas que han causado diferentes desperfectos desde que llegaron.
“La Gerencia Asistencial de Atención Primaria ha realizado distintas obras para restaurar las diversas incidencias, que se han ido agravando en los últimos meses y que han conducido a la adopción de medidas urgentes, dado que las instalaciones sanitarias no cumplen las condiciones de salubridad y seguridad”, señalan en el comunicado difundido desde Sanidad.
Añaden además que desde la Gerencia han solicitado en diversas ocasiones al arrendador una solución, sin éxito. Defienden que es por ello que se ha decidido trasladar el centro de manera inminente al Centro de Salud Doctor Castroviejo.
Asimismo, se encuentra en trámite una denuncia contra el propietario por incumplir el contrato de arrendamiento y por su inactividad ante los problemas que estos okupas han generado.
“Una decisión traumática”
Las respuestas por parte de vecinos, asociaciones y partidos políticos no han tardado en llegar. Jesús Escudero, portavoz de la Asociación Cuatro Caminos-Tetuán, ha destacado que, de los 24.000 pacientes afectados, muchos tienen una elevada edad y dificultades para desplazarse más de dos kilómetros al nuevo centro de salud. Todo ello agravado por la mala conexión de transporte público entre los barrios en los que se ubican ambos centros.
Asegura que no conocen la fecha exacta de la llegada de los okupas al inmueble, pero incide en que desde la Comunidad de Madrid han tenido “el tiempo suficiente par no tener que tomar una decisión tan traumática como es el cierre, sin otro recurso que el traslado a otro centro de salud fuera del barrio”.
“La Gerencia Asistencial de Atención Primaria de la Comunidad de Madrid conoce desde hace varios años el conflicto. Ha tenido que realizar obras en este centro por otros desperfectos y hasta ahora no ha adoptado ninguna denuncia o solución alternativa ni ha comentado nada con nadie ni informado a las asociaciones de vecinos ni a los usuarios, partidos políticos o a la Junta Municipal. Todo ha sido muy precipitado y a través de decisiones dictatoriales”, apunta.
Y, al igual que los pacientes se desplazan, los profesionales que trabajan en Villaamil, también. “Tienen que cambiar su rutina habitual para realizar su trabajo en unos nuevos despachos, que desconocen y a un cambio de dirección en un lugar muy alejado de donde estaban realizando su labor”, subraya.
Fue a través de un cartel en la entrada del ambulatorio –y también por el boca-oreja entre profesionales y pacientes– como se notificó el cierre del inmueble sanitario, sin recoger opiniones ni ofrecer más alternativas.
“En el barrio existen otros centros de salud a los que les sería más fácil el acceso a los pacientes. Podrían haber dado la oportunidad a los pacientes de preguntarles qué centro les venía mejor para ser atendidos... Ha sido una orden tajante”, lamenta Escudero.
“Lo primero es informar de sus intenciones, buscar soluciones, opiniones, preguntar a sus propios trabajadores y usuarios qué solución es la más conveniente... No nos creemos, debido a la situación actual de la Atención Primaria, que sea una solución "transitoria" ni que los problemas de este centro se vayan a solucionar. Creemos necesario buscar otra alternativa para que haya un centro de salud en la barriada de Berruguete”, agrega.
La asociación se ha encargado de informar a los vecinos de la situación y ha organizado diferentes concentraciones, así como contactado con otras asociaciones y partidos políticos para denunciar el cierre inminente del centro.
Por su parte, desde IU Tetuán han denunciado también la situación, hablando de “cierre precipitado y sin alternativas viables para el vecindario”, y haciendo mención a la llegada del verano, que trae consigo la falta de profesionales de la Atención Primaria.
“La Comunidad se ha limitado a justificar el cierre de este centro esgrimiendo como razón los múltiples desperfectos ocasionados desde hace años por unos okupas”, señalan.
“Desde IU ponemos en duda que sea necesario el cierre para solucionar dichos desperfectos y denunciamos que la Comunidad de Madrid ni siquiera haya tenido la decencia de explicar cuánto tiempo estaremos las vecinas y vecinos de la zona sin nuestro centro de salud y teniendo que desplazarnos hasta otro distrito para poder tener atención sanitaria”, ha recriminado la formación.
“Sospechamos que el Partido Popular y sus socios no dan esta información porque pretenden cerrarlo definitivamente. Quieren cerrar este centro no por las razones indicadas sino enmarcado en una estrategia de ir degradando la Sanidad pública cada vez más, precarizándola, saturándola y formando listas de espera interminables, para ir derivando a más y más pacientes a la privada”, sentencian.