Las redes sociales se han convertido en un hervidero de quejas vecinales por la noche en vela que Amanecer Bailando 'ha regalado' a los vecinos de Móstoles y Alcorcón desde el Prado Ovejero, el parque en el que se celebró el polémico festival. Ambos municipios han amanecido cubierto por un manto de basura.
Amanecer Bailando aterrizaba en Móstoles con polémica y así termina. Los vecinos han recurrido a las redes sociales para denunciar que en el parque Prado Ovejero y las zonas verdes y calles colindantes parece haberse librado una batalla campal. Los restos del macrobotellón nocturno podían verse esta mañana, tal como evidencian las fotografías colgadas en la red no solo por anónimos, sino por los partidos del Ayuntamiento de la ciudad.
Varios mostoleños han acompañado sus quejas con vídeos en los que se aprecia el volúmen de la música desde sus camas. Aseguran haber pasado la noche en vela y las molestias han llegado hasta los barrios cercanos de Alcorcón. De esta forma, la efectividad de las pantallas acústicas instaladas para minimizar el impacto de los decibelios en el descanso de los residentes quedaría en entredicho.
Podemos Móstoles ha comunicado que "seguirá luchando para que en ningún parque público puedan realizarse actividades privadas que perjudiquen el entorno". Por su parte, el portavoz de Ganar Acorcón, Gabriel Ortega, ha grabado un vídeo a plena luz del día en el que se aprecia cómo el evento sigue en marcha. El edil ha calificado de "disparate" enclavar una iniciativa de estas características "en el núcleo urbano, con viviendas a 25 metros".
"Los vecinos llevan 18 horas seguidas soportando hard style", ha señalado. "Esto marca un antes y un después en el Gobierno municipal", ha apostillado con mención personal a la alcaldesa, Noelia Posse.
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