El teatro cómico español ha dejado grandes actores como Antonio Guzmán, intérprete del teatro del Siglo de Oro que consiguió que la reina María Josefa Amalia de Sajonia se riese.
El 3 de enero de 1857 fallecía con 71 años el actor madrileño Antonio Guzmán. Conocido por dedicarse al teatro de comedia, participó en diferentes obras como El Trovador de García Gutiérrez, La casa de Tócame Roque de Ramón de la Cruz y La pata de cabra, de Hartzenbusch.
Guzmán fue uno de los intérpretes más graciosos del teatro del Siglo de Oro español. Sus actuaciones hicieron reír hasta al público más imposible. La reina María Josefa Amalia de Sajonia tenía fama de ser muy seria, pero el cómico con su arte consiguió que la esposa del monarca Fernando VII sufriese un ataque de risa en mitad de la obra El Trovador.
Perplejo ante la alegría de su mujer, Fernando VII ofreció a Guzmán carta blanca: cualquier cosa que pidiese, se la concedería. Como buen actor, decidió que el mejor presente que podía recibir fue la
renovación de la obra por una temporada más, con el objetivo de seguir sacando sonrisas a los presentes.