El Ayuntamiento de Móstoles asegura que, pase lo que pase con el Instituto Municipal de Suelo (IMS), que afronta bajadas salariales y recortes de personal por el delicado estado de sus cuentas, no se plantea vender viviendas que puedan terminar en manos de fondos buitre.
El concejal de Urbanismo de
Móstoles,
Eduardo Gutiérrez (IUCM), ha negado este jueves que el Ayuntamiento esté contemplando deshacerse del patrimonio de viviendas del
Instituto Municipal de Suelo (IMS) para paliar la afectada situación económica de esta sociedad anónima con capital
cien por cien público.El pasado domingo,
CCOO advirtió en este digital que los planes del Consistorio para tapar el agujero del IMS pasaban no solo por un cambio de las condiciones laborales,
sino por "descapitalizar" la empresa, lo que podría desembocar en una situación similar a lo ocurrido en la capital con la
venta de viviendas públicas a fondos buitre."Es una mentira y genera
alarmismo. Si el IMS desapareciese, el Ayuntamiento sería el encargado de gestionar estas viviendas", destaca el edil a
Madridiario. "Eso lo intentó el anterior gobierno y todos nos opusimos".
Bajada de sueldo y salidas incentivadasEl IMS está en plena guerra laboral. En la actualidad, trabaja para él una plantilla de
31 trabajadores contratados, todos con una
alta cualificación. CCOO ha anunciado la interposición de un
conflicto colectivo para protestar por los planes del Ayuntamiento para recortar
masa salarial.Este mes, las
nóminas se reducirán de media
un 26 por ciento. Gutiérrez defiende llevar los niveles salariales a la "normalidad" del Ayuntamiento. Según el concejal, todos los empleados del IMS cobran por encima de los
26.000 euros anuales, la mitad
más de 55.000 y hay alguno que acaricia los
100.000. A ellos, a los que más ingresan, se les bajará más el sueldo a finales de este mes. Incluso
a la mitad. Además, siguiendo las recomendaciones de un informe elaborado por la auditora
PwC, el Consistorio quiere dejar el número de contratados en
13. Para ello, ha establecido un plan de
bajas incentivadas que incluye indemnizaciones de
35 días por año trabajado hasta un máximo de
15 meses. Por el momento,
dos personas ya se han acogido a él.
Horarios de ventaOtro punto de rifirrafe entre sindicatos y administración es el
horario. Urbanismo quiere que los trabajadores arrimen aún más el hombro y desde este miércoles el horario del IMS no es solo de mañana.
La idea es que, con la recién inaugurada atención también por la tarde -partiendo la jornada de los empleados, en otras palabras-, aumenten las ventas de
plazas de aparcamiento o locales.Gutiérrez admite los problemas económicos 'heredados' del IMS. A su juicio, el instituto está en "ruina" y, prácticamente, "en situación concursal". El concejal cree que esta situación tien su origen en el megalómano e inacabado
Andrés Torrejón, pero también en los
17 millones de euros en sentencias judiciales ganadas por constructoras que aún no han cobrado y la fusión con la
Empresa Municipal de Aparcamientos (EMA), que incrementó el número de empleados.