Los servicios técnicos municipales llevan actuando en el Beti Jai desde 2015 con
actuaciones de refuerzo. Estas obras buscan "evitar una situación de colapso por el
estado de ruina del edificio". La primera actuación de las dos que conforman el proyecto ya se está llevando a cabo. Se trata de la
retirada de la cubierta, acción que se prolongará hasta
septiembre y que, con un un presupuesto de
1,5 millones, busca la
consolidación de las gradas. La segunda fase es la
consolidación de la cubierta, que arrancará una vez terminada la retirada de ésta y tiene un plazo de
7 meses de duración, con un presupuesto cercano al
millón de euros.