Según informa en su Informe Anual 2015, "un ciudadano" se dirigió a la institución que lidera Soledad Becerril para "poner de manifiesto las molestias procedentes de un incendio producido en julio de 2015 en "un vertedero ilegal aledaño al complejo de Valdemingómez", debido a que el humo respirado "podría ser tóxico". Se trata del fuego cuyo humo causó serias molestias durante días a los vecinos de Rivas-Vaciamadrid y el Ensanche de Vallecas, y que, tras ser apagado y sellado con cemento por parte del Consistorio, volvió a reactivarse a finales de diciembre.
Este ciudadano manifestaba que, tal y como había sido publicado en los medios de comunicación, este vertedero ilegal "había sido denunciado varias veces ante el Seprona, aunque desconocía los motivos por los que no había sido clausurado".
Debido a esta queja, prosigue el informe, el Defensor del Pueblo solicitó al Ayuntamiento de Madrid, en cuyo término municipal se encuentran los terrenos información sobre las medidas y actuaciones municipales para evitar quemas en ese punto. Además, se solicitó información sobre los años que llevaba usándose irregularmente la finca como vertedero, así como las actuaciones realizadas por el Consistorio para proceder a su clausura. En este sentido, también se pidieron documentos que mostrasen si el Gobierno municipal tuvo noticia de haberse iniciado alguna actuación judicial.
La contestación municipal, recoge este texto, informó de que durante estos años se habían llevado a cabo actuaciones en esa zona por parte del Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid, incluso se dio cuenta de algunas de las actuaciones llevadas a cabo por la Fiscalía. Asimismo, señaló que a finales de julio de 2015 fue dictada una resolución judicial decretando la paralización de la actividad ilegal.
Más visitas de inspección
Antes de dar por terminadas las actuaciones ante el Ayuntamiento de la capital, prosigue el informe, el Defensor del Pueblo señaló que, dada la "proliferación de solares abandonados en la zona", "sería conveniente girar visitas de inspección con cierta regularidad para prevenir el asentamiento de nuevos vertederos ilegales y, en su caso, proceder a la clausura o paralización de dichas actividades". Precisamente, la Asociación Rivas Contaminación Zero, creada a raíz del incendio del vertedero para luchar contra la contaminación y la proliferación de basura incontrolada en la zona, y que también se ha dirigido a la institución para denunciar estos hechos, alertó el pasado mes de enero de que habían 'brotado' nuevos vertederos ilegales en torno al que ardió en verano, y de que este último continúa expulsando humo. Los Ayuntamientos de Madrid y Rivas, por su parte, se reunieron el pasado 3 de febrero para abordar la situación. Según un comunicado, ambos acordaron establecer un protocolo de actuación en el vertedero y evaluar y exigir el cumplimiento del plan autonómico de residuos 2006-2016, además de elaborar un plan a medio plazo para la recuperación de la zona.
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