El Gobierno se efrenta a un incendio inesperado en pleno parón por el puente de mayo. Tras la polémica sentencia por el caso de La Manada, el ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha explicado que el juez que quiso absolver a los condenados tiene "algún problema" personal, aunque no ha dado más detalles. Estas críticas se han vuelto en su contra y las siete asociaciones de la magistratura han reclamado su dimisión al interpretarlo como un ataque a la independencia del Poder Judicial.