
De todos estos nuevos trabajadores contratados por la compañía, que ya cuenta con 5.650 profesionales, más del 90 por ciento serán jóvenes de entre 18 y 25 años procedentes del Servicio Regional de Empleo. Todos ellos pasarán o están pasando en estos momentos el correspondiente curso de formación, unas clases que cuentan con una parte teórica y una parte práctica. Esta última se realiza gracias a los simuladores de conducción de trenes con los que cuenta Metro, y la recreación de estaciones con todos los sistemas de seguridad e instalaciones. Así, en las cocheras de Canillejas se ha reproducido fielmente y a escala natural una estación de Metro, con su vestíbulo principal, el andén, los distintos tipos de cancelas, los torniquetes, los ascensores con su correspondiente maquinaria, las taquillas y las máquinas expendedoras de billetes.
En esta estación 'de mentira' los futuros trabajadores de Metro pueden practicar con máquinas de verdad, y gracias a un aula multimedia de apoyo, se reproducen averías e incidencias en tiempo real para que el futuro personal pueda resolverlas igual que haría en la estación. Así, por ejemplo, en este aula multimedia se puede recrear una avería en una de las escaleras mecánicas de la estación, de tal forma que los alumnos vean la alarma en el ordenador y tengan que actuar tal y como harían en la estación. Los alumnos pueden enfrentarse así a las cientos de situaciones que tendrán que afrontar en la estación real. Además, reciben unas clases especiales sobre los distintos tipos de títulos de transporte, los billetes sencillos, los abonos de diez viajes o los abonos mensuales, así como sobre las diferentes clases de máquinas expendedoras.
Junto a las clases en esta estación simulada, "también mandamos a la gente a hacer prácticas en la línea", donde el personal de Metro supervisa su aprendizaje. Además de los cursos de formación para los nuevos trabajadores, Metro también imparte durante todo el año cursos de promoción interna para los empleados de la compañía. Así, por ejemplo, estos días finaliza el curso para jefe de sector en el que han participado durante dieciséis semanas treinta taquilleras -casualmente son todo mujeres-. "Durante todo este tiempo se les exime de su actividad y están sólo en formación", relata José Luis Gómez, "y una vez termina el curso tienen que pasar un examen final para ver si efectivamente han adquirido los conocimientos y pueden promocionar a un puesto de trabajo de un nivel superior". Lo habitual es que "el 90 por ciento de la gente apruebe", según el coordinador de formación.
En el caso de estos cursos, la formación se imparte tanto en las aulas de las cocheras de Canillejas como en el propio puesto de trabajo para poder practicar in situ. Así, en el caso de la promoción a jefe de sector -es la persona que controla dos estaciones de una línea- "hacen prácticas por la noche, cuando el Metro ya ha cerrado, para encerrar trenes en las cocheras". La Consejería de Transportes mantiene un convenio con la Consejería de Empleo y Mujer para ofertar cursos de formación para desempleados como futuros trabajadores de Metro de Madrid. El acuerdo prevé la realización de quince cursos y el compromiso de que, al menos, el 60 por ciento de los alumnos sean contratados por la empresa metropolitana una vez finalizados los mismos. Sin embargo, ya en el convenio del año pasado se acabó contratando al cien por cien de los alumnos que habían pasado por sus cursos de formación. En total, ya son dos los convenios firmados en esta legislatura de este tipo, que se suman a seis anteriores.