Además, y en cuanto al efecto que puede producir en los niños, López Reillo, ha señalado que todavía tienen los órganos en crecimiento y que son a los que más les afectan estas emisiones en bronquios y pulmones. En este sentido, ha afirmado que es una medida que repercute "favorablemente" en la ciudad y que no ha aumentado la contaminación en otros distritos periféricos.
"Queremos que no haya color político para esto, la salud publica no tiene color, y si cometen delitos de prevaricación, que la justicia actúe contra los políticos que lo estén haciendo", ha mantenido, a lo que ha añadido que den la posibilidad a los ciudadanos de respirar mejor, sin tanto ruido, y principalmente por todos los niños y niñas.
Por otro lado, la secretaria general de la Federación de Enseñanza de CCOO Madrid, Isabel Galvín, ha señalado que apoyan la iniciativa de la comunidad educativa para que el nuevo alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, no acabe con Madrid Central. "Apoyamos esta medida porque defendemos la salud pública del alumnado y profesorado", ha apuntado, a lo que ha añadido que gracias esta medida los alumnos pueden ir caminando a sus colegios del distrito Centro.
Así, ha destacado que esta medida tiene que "quedar fuera" del juego político y de las pretensiones y radicalismos del nuevo alcalde", así como que se trata de una cuestión de salud que afecta a todos los ciudadanos madrileños.
Por último, el vocal de la delegación de la FAPA en Arganzuela, Manuel Díaz, ha señalado que Madrid Central ha demostrado en poco tiempo su eficacia en "los niveles de calidad del aire, la seguridad vial y la habitabilidad de la ciudad".
Asimismo, ha apuntado que piden a los poderes públicos que tengan en cuenta la opinión de las familias y que se amplíen las zonas de restricción al tráfico, no solo en el distrito Centro, para vivir en un entorno "amigable y saludable".