“Queremos productos básicos y no tener que ir a comprarlos a cinco paradas de autobús de distancia”. Así relataba hace unos meses Carmen Rodríguez, una vecina de Usera, a este diario la particular odisea a la que se enfrentaba para hacer la compra tras el cierre, el pasado 3 de mayo, del mercado de Orcasur.
Junto a otras residentes de la zona, recibió a este diario con el fin de exponer sus quejas ante la única opción que le quedaba entonces: ir a La Peseta, Plaza Elíptica o Ciudad de los Ángeles, ubicaciones a una considerable distancia. Sin embargo, pronto se revertirá la situación. Según ha podido saber Madridiario, el Ayuntamiento reabrirá en pocas semanas los locales que dan al exterior para paliar las quejas vecinales mientras la rehabilitación del mercado sigue su curso.
"En vista de la demanda", explican fuentes de la Junta de Usera, el Área de Economía y Hacienda ha decidido que la Dirección General de Patrimonio otorgue una autorización especial a Mercamadrid para que distribuya las licencias de éstos y los reabra “cuanto antes”.

En cuanto a la reforma del interior, las mismas fuentes explican que el concurso Reiventing Cities continúa y que está previsto que el fallo se produzca en próximas fechas para acometer las obras en la siguiente legislatura. Cabe recordar que la clausura del mercado se produjo debido a que no era viable, pues la asociación de comerciantes que lo regentaba, con contrato hasta 2032, había contraído una deuda "inasumible".
Revitalizar el mercado para revitalizar el barrio
Tal y como la define el Ayuntamiento en la convocatoria del concurso, el mercado, que tiene una superficie de 1.880 metros cuadrados, se encuentra en una zona que se percibe como "un lugar inseguro y abandonado". Por eso, es un lugar prioritario que se concibe como un "área de oportunidad" para impulsar con su rehabilitación la revitalización del lugar.
Reinventing Cities busca así que los arquitectos lleven a cabo una actuación urbana que "genere nuevas dinámicas de uso y convivencia" a la vez que consolide el mercado como un lugar que potencie el emprendimiento local con nuevas oportunidades de empleo.
La obra, que aún no tiene ganador ni plazos, supondrá sí o sí el cambio de ubicación de la entrada al mercado, que se ubicará en la plaza del Pueblo para que pueda relacionarse mejor con otros edificios cercanos que acogen una biblioteca, una asociación de vecinos y un centro de mayores.