La rotura de la tubería de plaza de Quevedo, que ha provocado el corte de la línea 2 de Metro de Madrid, ha sido fortuita y también ha obligado a cortar al tráfico dos carriles de la calle Bravo Murillo, ha informado un portavoz del Canal Isabel II.
El primer aviso ha entrado a las 6.30 horas y alertaba de la rotura de una tubería de 300 milímetros de diámetro, que ha provocado que saliera agua y afectara a las líneas 4 -en el tramo entre Colón y Argüelles- y 2 de Metro (la única que permanece cortada) -entre Ópera y Canal-.
La zona afectada es la Glorieta de Quevedo, en la confluencia de las calles San Bernardo y Bravo Murillo. En principio no ha habido afecciones al suministro aunque sí que ha entrado una llamada de un vecino informando de problemas, por lo que han enviado de manera preventiva garrafas de agua.
La reparación se ha complicado porque ha sido necesario talar un árbol que hay encima de la tubería. Los técnicos del Canal trabajan para arreglar el problema.