29/08/2018@13:58:32
Los vecinos de un inmueble de la calle Alcalá, concretamente en el número 143, viven estos días con preocupación e incertidumbre por el estado de los cimientos de su edificio después de que el pasado lunes tuvieran que ser desalojados por la aparición de grietas y daños en la estrutura como consecuencia de las obras que se están desarrollando en el solar contiguo. Técnicos de la obra han pedido "confianza", pero los vecinos se muestran inquietos tras un segundo desalojo este martes por el movimiento de uno de los muros de carga.