Un centro maternal como la Residencia Norte de Madrid ofrece mucho más que techo y comida. Aquí la mujer recibe asistencia psicológica, se forma, aprende a buscar trabajo y a ejercer una maternidad positiva. Además de ayudas, tiene responsabilidades. ¿El gran objetivo? Que tome las riendas de su vida.
La Comunidad asesora a las madres que no pueden cuidar a sus hijos. Comunicada la decisión, en el hospital o con una llamada al 012 o al 112, el protocolo se activa de inmediato, no tiene consecuencias penales y favorece la adopción de los niños.