Valdemingómez comercializará el biogás desde marzo
Por MDO/Efe
martes 21 de febrero de 2012, 00:00h
El gas que se produce en el Parque Tecnológico de Valdemingómez a partir de la basura orgánica que produce la ciudad de Madrid comenzará a venderse a principios de marzo a través de la red de Enagas.
La directora general del Parque Tecnológico de Valdemingómez, Miriam Sánchez Portel, ha informado este martes en la Comisión municipal de Medio Ambiente, Seguridad y Movilidad, en respuesta a una pregunta de UPyD, que la comercialización de este gas fue adjudicada el pasado 13 de febrero por el Ayuntamiento de Madrid a la empresa Cepsa por un precio de 25,95 euros el megavatio hora térmico.
Esta es la primera vez que el gas producido de esta forma por un ayuntamiento se comercializa en España, ha destacado Sánchez Portel, que ha indicado que el contrato con Cepsa será firmado en los próximos días.
En el Parque Tecnológico de Valdemingómez se construyeron en 2008 dos plantas de biometanización de materia orgánica -Las Dehesas y La Paloma-.
En ellas se transforman unas 300.000 toneladas de residuos orgánicos -alrededor de dos tercios de toda la materia orgánica de las basuras domiciliarias de la capital- en aproximadamente 240.000 toneladas de biomasa, cuya fermentación produce 34 millones de metros cúbicos de biogás.
Menos emisiones
Según datos facilitados por el Ayuntamiento, la transformación de esa cantidad de residuos en biogás evita además la emisión a la atmósfera de 300.000 toneladas de dióxido de carbono.
El concejal de UPyD Jaime de Berenguer, autor de la pregunta, ha dicho en la Comisión que las dos plantas de biometanización tardaron en construirse 35 meses, un 133 por ciento más de lo previsto, y costaron 79 millones en vez de los 51 inicialmente previsto, un 54 por ciento más.
De Berenguer ha sumado a esa cantidad los costes de gestión y de nuevas obras hasta un total de 125 millones de euros, lo que ha calificado como un coste "absolutamente desorbitado" y le ha llevado a pedir a los responsables municipales "más cuidado y más respeto con el dinero de los ciudadanos".
Miriam Sánchez ha precisado, tras considerar que no se pueden sumar los costes de gestión a la inversión, que el coste total fue de 78,6 millones y ha destacado que 34,4 de esos millones fueron aportados por fondos cohesión europeos.
Ha justificado ese 54,4 por ciento más coste por la modificación de los proyectos que se efectuó en el año 2006 tras detectarse defectos en plantas similares en otros lugares de España