El Gobierno regional avanza en una de las promesas que Ia presidenta Isabel Díaz Ayuso realizó en su discurso de investidura: blindar la supresión y la bajada de los impuestos de Madrid. El Consejo de Gobierno ha aprobado el anteproyecto de Ley de Defensa de la Autonomía Financiera, una herramienta con la que, según Ayuso, se van a "asegurar las competencias fiscales que tenemos recogidas en la Constitución y que nos permiten seguir siendo libres y mejores".
Con esta Ley, el Gobierno madrileño pretende evitar que otras normas superiores que puedan ser aprobadas en el Congreso de los Diputados no interfieran en las competencias autonómicas en materia fiscal de Madrid. En concreto, uno de los escenarios que Díaz Ayuso pretende evitar es que el Gobierno de España y distintas fuerzas parlamentarias nacionales puedan imponer una mayor tributación a los contribuyentes madrileños en los impuestos de Sucesiones y Patrimonio. La tramitación de la norma sigue su curso y llegará a la Asamblea de Madrid donde el Ejecutivo regional pretende conseguir aprobarla con el apoyo de Vox.
Según fuentes de la Consejería de Empleo y Hacienda, la “armonización” fiscal al alza le costaría al bolsillo de los madrileños un total de 5.900 millones de euros, es decir, una media de 2.270 euros más por familia al año. De este modo, una herencia media en Madrid pasaría de pagar 22 euros a 2.200 euros, esto es cien veces más, en el caso de que se equiparase el impuesto de Sucesiones tal y como pretende el Ministerio de Hacienda.
Los contribuyentes madrileños se han ahorrado de media 16.500 euros en el pago de impuestos desde 2004, fecha en la que empezaron las sucesivas rebajas de impuestos de los distintos Gobiernos en la Comunidad. Esta política de impuestos bajos ha supuesto que la región sea la CCAA más competitiva a nivel fiscal, aportando el 68% del total de los recursos del Fondo de Garantía del que se nutren los Servicios Públicos de todas las Administraciones regionales españolas.
Autonomía constitucional
Para defender esta autonomía fiscal, la Comunidad de Madrid destaca dos artículos de la Constitución: el 156 y el 157. El primero recoge que las Comunidades Autónomas “gozarán de autonomía financiera para el desarrollo y ejecución de sus competencias con arreglo a los principios de coordinación con la Hacienda estatal y de solidaridad entre todos los españoles”.
En cuanto al segundo, habla de los recursos con los que cuentan las comunidades, tales como “los impuestos cedidos total o parcialmente por el Estado; recargos sobre impuestos estatales y otras participaciones en los ingresos del Estado además de sus propios impuestos, tasas y contribuciones especiales”.
De cara a proteger la independencia autonómica en la gestión de los tributos que tiene cedidos, esta Ley pretende reforzar la vigencia y defensa de los principios constitucionales de la autonomía financiera de la Comunidad de Madrid como presupuesto necesario para el ejercicio de la autonomía política.
Lo quiere hacer en su doble vertiente: la autonomía fiscal, tanto para la determinación de los tributos propios como en el ejercicio de las competencias constitucionalmente atribuidas sobre los tributos cedidos del Estado; y la autonomía en el gasto, en cuanto a la cuantificación y distribución del mismo para el cumplimiento de sus objetivos, sin condicionamientos ni injerencias indebidas.
Críticas de la oposición
La portavoz adjunta de Más Madrid en la Asamblea, María Pastor, ha criticado el nuevo Proyecto de Ley que, a su entender, demuestra que la presidenta "no tiene ideas nuevas y todo lo apuesta a confrontar con el Gobierno de España". Pastor ha lamentado que Ayuso se mueva por "el sectarismo ideológico" que hace que se insista una vez más en "recetas fiscales obsoletas, ineficaces e injustas".
La diputada cree que Ayuso "intenta hacer algo imposible: soplar y sorber al mismo tiempo" y traslada su deseo de que "ojalá Ayuso quisiera blindar la educación pública, la sanidad pública y los servicios sociales. En cambio, ha decidido habilitar un modelo fiscal insolidario y que lastra el desarrollo de Madrid", ha zanjado.
Por su parte, la portavoz de Unidas Podemos, Carolina Alonso, ha tachado de "trampantojo" lo que está haciendo la Comunidad de Madrid con este nuevo Proyecto Proyecto de Ley de Defensa de la Autonomía Financiera con el que la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, quiere que Madrid sea "un refugio para ultraricos".
"No para de bajar a los más ricos los impuestos mientras dice que se los va a bajar por igual a todo el mundo. No se aplican impuestos a las grandes fortunas y gracias a estas estratagemas solo benefician a unos pocos. Se calcula que en Madrid dejamos de ingresar cerca 1.000 millones de euros", ha señalado Alonso. La portavoz de la formación morada ha insistido en que ese dinero se podría invertir en sanidad y educación pública, con lo que pasarían de "esta a la cola a ir a la cabeza".