¿Recuerdan la imagen de José Luis López Vázquez luchando por salir de una cabina en la película La Cabina? Este símbolo que está desapareciendo en España por su desuso será el objeto de homenaje al director Antonio Mercero en el madrileño barrio de Chamberí. David Linares, guionista y seguidor del cineasta, dio pie a una propuesta vía Twitter que este martes se debatirá en el Pleno del Ayuntamiento de Madrid y que cuenta con los votos a favor de los cuatro grupos municipales.
La admiración y cariño que el guionista David Linares tiene al director, productor y guionista Antonio Mercero, se ha visto traducida en una propuesta que este martes los grupos municipales del Ayuntamiento de Madrid votarán en el Pleno.
Fan de Verano Azul, Farmacia de Guardia o Turno de Oficio, Linares entró en el oficio hace diez años guiado por este maestro de la televisión y el cine. Su muerte el pasado 12 de mayo impulsó un tweet de Linares en el que dejaba caer lo “bonito que sería” un homenaje a este genio cinematográfico y bajo el hashtag #UnaCabinaParaMercero, la idea viajó por todo Madrid.
La magia de las redes sociales y change.org (el madrileño consiguió 4.726 firmas) hizo efecto y, tras ponerse en contacto con varias concejalas del Ayuntamiento de Madrid, la propuesta del guionista de instalar una cabina roja en el barrio de Chamberí en recuerdo a la película La Cabina (1972) se debatirá en el Pleno de este martes.
A pesar de que todos los grupos municipales han asegurado que votarán a favor, Linares confiesa a Madridiario que vivirá el Pleno –ha sido invitado a verlo– con muchos nervios.
¿Cómo surge la idea de llevar a cabo este homenaje?
La idea surge de casualidad. Cuando murió me dio pena y tuiteé sin ninguna intención: “Qué bonito sería que en Madrid le homenajeáramos y se pusiera en Chamberí una cabina como la de la película”. Es verdad que cuando se habla de Antonio Mercero se piensa en Verano Azul, en Farmacia de Guardia, pero no se recuerda la película La Cabina, que ha ganado un Emmy. Antonio Mercero es el único que ha ganado un Emmy en España. Lo tiene todo: ha ganado un Emmy, está un poco olvidada y es un icono único.
¿Qué ha dado Antonio Mercero a Madrid para que la ciudad le ponga una cabina?
Madrid es un personaje más en sus películas. Farmacia de Guardia está ambientada en un barrio de Madrid, con sus vecinos y sus historias; esa sensación de típico barrio madrileño en el que naces, creces y no te vas, antiguamente hasta que te casabas… Creo que Antonio reflejaba muy bien esto y en el Madrid de La Cabina vemos las ideas de la época, el final del franquismo, con esos problemas de comunicación, ese palpitar de querer algo nuevo…
Al día se publican cientos de change.org, ¿por qué crees que el tuyo tuvo tanto éxito?
El éxito no es mío, sino de Antonio Mercero. Es una figura que nos ha acompañado a lo largo de toda la vida. El éxito radica en que Antonio era como alguien más de nuestra familia, como un tío lejano que venía a vernos durante el verano o por las tardes a traernos chucherías.
¿Qué te que dijeron los grupos municipales cuando les trasladaste la propuesta?
Me puse en contacto con ellos a través de Twitter –la propuesta se ha cocido en Twitter y ha sido el éxito también gracias a eso– y enseguida me escribieron Mar Espinar (PSOE) y Sofía Miranda (Ciudadanos).
Estos dos grupos han estado conmigo desde el principio y entre Mar y Sofía consiguieron el apoyo del PP, uniéndose después Ahora Madrid. Me alegra mucho, porque es muy especial que todos los grupos políticos que representan a los madrileños apoyen esta propuesta cultural, cinematográfica, y me parece bonito que sea la cultura la que haga que cuatro partidos que están de acuerdo muy pocas veces se unan, hagan fuerza y consigan que Antonio tenga el homenaje que se merece.
Todos los partidos han confirmado ya su voto a favor pero, ¿te preocupa que haya un giro de guion y no se apruebe en el Pleno de este martes?
Si esto fuera una historia de Antonio Mercero, habría un giro. Pasaría algo que haría muchísimo más difíciles las cosas. Igual se apagan los micrófonos, se va la luz en el Pleno… Pero como casi todo lo que hacía Antonio, hay un final feliz. Molaría que hubiese giros de guion porque sería todo más emocionante. Si esto lo escribiera Antonio, el final sería bonito.
¿Cuál es el paso siguiente a la aprobación en el Pleno?
Hemos pedido que la cabina se instale en Chamberí, a poder ser en la Plaza Valle de Súchil, que está a 50 metros de donde se rodó, pero son los técnicos del Ayuntamiento los que van a decidir si este es el lugar más adecuado.
También planteaste la creación de un ciclo de cine. ¿Crees que puede llevarse a cabo?
Una vez se haga esto, me gustaría continuar con la propuesta. Me he venido arriba después de que todo el mundo me haga caso y quiero hacer más cosas por Madrid. Me encantaría que al pasear por la ciudad hubiera símbolos como la cabina que te recuerden qué películas se han rodado allí. Me gustaría muchísimo pasear por mi ciudad y recordar a todo el mundo que es un escenario cinematográfico de películas nacionales e internacionales.
Por último, como impulsor de este homenaje, ¿cómo estás viviendo este proceso?
Estoy flipando. Un día escribí un tweet desde mi casa y dos semanas después estaba reunido con políticos. Es alucinante. Lo vivo como una final de la Champions, la final de Eurovisión o de un reality show que me gusta, es muy emocionante, muy bonito y me reconforta como ciudadano. Son esas cosas bonitas que pasan en la vida.