A principios del mes de junio arrancaron las obras para la supresión de barreras arquitectónicas y mejora de la accesibilidad de la calle del Doce de Octubre, ubicada en el distrito de Retiro. Los trabajos previstos englobaban la remodelación de la vía en el tramo comprendido entre Narváez y Antonio Arias, además de la reforma en el segmento entre Alcalde Sainz de Baranda y Pilar Millán Astray y sus correspondientes cruces. Las obras han sido ejecutadas por la Junta Municipal de Retiro, con una inversión de 350.000 euros y una duración de seis meses.
Entre los principales cambios que estos trabajos para la mejora de la accesibilidad van a introducir se encuentra la eliminación del doble carril de circulación, habilitando uno solo de 3,5 metros de anchura y de sentido único, aprovechando el otro carril para hacer aparcamientos en batería. Los órganos municipales aseguran que estas obras “mejorarán el entorno, haciéndolo más accesible y con cruces más seguros”, pero muchos vecinos de la calle del Doce de Octubre se manifiestan “en contra” de que se lleven a cabo estos cambios, ya que consideran que “las obras van a traer tráfico y contaminación”.
Las obras han sembrado la discordia entre la vecindad del barrio de Ibiza, llegando incluso a realizar pintadas en las calles mostrando su negativa a las mismas. La presidenta de la Asociación Vecinal de Retiro Norte, Ángeles Rodríguez, explica que “la Junta informó a los vecinos de la nueva reforma cuando ya estaba licitada la obra”. Este acto provocó parte de la crispación de los vecinos de la calle, que reclaman que se tenga en cuenta “las verdaderas necesidades” de la zona, como la remodelación de los Jardines Doce de Octubre.
Entornos escolares seguros
La calle del Doce de Octubre contaba hasta hace un par de meses con dos carriles en los que se permitía conducir a 50 kilómetros por hora. Según relata la presidenta de la Asociación Vecinal, “el plan inicial era reducir la velocidad”, ya que en el entorno de esta calle se encuentran la Escuela Infantil Magos y el Colegio Escuelas Aguirre. “Todos los que hemos ido a pie hemos observado que era una fuente de peligro, ya que al tener dos carriles muchos coches aceleraban”, cuenta Ángeles Rodríguez. De hecho, hace un par de años hubo que lamentar una muerte en una de las calles del barrio de Ibiza debido a un atropello.
Para evitar nuevas desgracias, se aprobó por mayoría la propuesta de que la calle fuese limitada a 30 kilómetros por hora, reduciendo los carriles de dos a uno. La Asociación Vecinal explica que en ese momento “hubo vecinos que estaban en contra de que esta reducción”, por lo que juntaron firmas y el proyecto “quedó en un cajón y nunca se llevó a cabo”. Los vecinos en aquel momento, al igual que en la actualidad, temían que estos cambios tuvieran como resultado más tráfico y mayores molestias, ya que la calle del Doce de Octubre “ha sido siempre muy tranquila”.
"Hay un gran problema de comunicación y de falta de respuesta con la Junta"
Tras varios años, este 2022 la Junta Municipal de Retiro decidió poner en marcha un nuevo proyecto totalmente diferente al anterior, en el que por fin se llevarían a cabo estas obras. Desde el gabinete del concejal de distrito explican que “las obras se encuadran dentro de un plan estratégico para hacer de los entornos escolares un lugar más seguro”. Para ello, se han puesto en marcha actuaciones como la reducción de la circulación, la modificación de las aceras y la mejora de los pasos de peatones. Esta iniciativa se aprobó por unanimidad de todos los grupos políticos del Ayuntamiento de Madrid con el fin de evitar desgracias como la ocurrida en 2021 en el entorno escolar del colegio Montealto.
Pero algunos vecinos de la calle del Doce de Octubre, por su parte, consideran que el aumento de seguridad en los espacios escolares “es una excusa”, ya que esta vía “no tiene colegios como tal”, pues el CEIP Escuelas Aguirre se encuentra entre Pío Baroja y Doce de Octubre. La Asociación Vecinal se encuentra a favor de estos cambios, pero creen que la reforma “no es del todo positiva”, ya que el nuevo uso que se va a dar a este carril no es el que esperaban. La presidenta de la Asociación Vecinal de Retiro dice “sí” al aumento de la seguridad en los entornos escolares, pero teniendo en cuenta a la asociación y comunicándose con los vecinos, “nunca llueve a gusto de todos, pero por lo menos deberían avisarnos”, explica.
Polémica y disidencias
La Asociación Vecinal de Retiro Norte resalta como aspectos positivos de estas obras la reducción de la velocidad y la eliminación de uno de los carriles, pero no comparten la decisión de convertir en plazas de aparcamiento el espacio que quedará libre. La Junta va a aumentar los aparcamientos para residentes, las conocidas “plazas verdes”, algo que según indican desde el gabinete del concejal de distrito “es una de las quejas más recurrentes entre los vecinos”. Con esta ampliación de estacionamientos pretenden dar respuesta a “una demanda de hace muchos años”, sin embargo, los vecinos no están de acuerdo en que se elimine un carril para crear estas plazas de aparcamiento.

La presidenta de la asociación asegura que años atrás se propuso la creación de un carril bici, algo que nunca se llevó a término, por lo que consideran este aumento de estacionamientos como algo “no tan positivo” ya que “es una decisión del concejal” y hubiesen preferido este espacio para bicicletas. Las quejas no quedan ahí. La polémica se ha desatado en base a numerosos puntos de esta reforma, como es el caso de las zonas de carga y descarga. Los vecinos consideran que estos espacios reservados para los camiones de los supermercados pueden entorpecer gravemente la circulación, al no existir otro carril para poder avanzar. “Ya habíamos detectado que las zonas de carga y descarga son insuficientes así que probablemente las ampliaremos”, explican desde la Junta Municipal.
Los vecinos también piden más zonas verdes, ya que los Jardines Doce de Octubre se encuentran “altamente deteriorados”. Actualmente, según explican los vecinos “no existe ningún sitio donde llevar a los niños para que jueguen”, pues en estos jardines “se trafica con sustancias estupefacientes”, algo que provoca miedo e incertidumbre entre las familias. “Podría ser una alternativa al Retiro cuando se cierra por inclemencias meteorológicas”, explica una vecina de la calle. Desde la Junta aseveran que este espacio se va a reformar para eliminar los puntos oscuros, “es una zona complicada porque está en cuesta y los setos son altos, por lo que se crean zonas oscuras y escondidas”, explican. La intención es que los jardines sean mucho más diáfanos y que haya más zonas infantiles. Sin embargo, todavía no pueden llevar a cabo estas actuaciones porque “hay una serie de filtraciones” en el aparcamiento de residentes que hay debajo, “primero tienen que intervenir ellos y después lo haremos nosotros”, añaden. La presidenta de la Asociación Vecinal considera que “igual no es suficiente, pero están intentando mejorar”.
Las disidencias son más que evidentes entre la asociación, los vecinos y la Junta de Retiro. Estas diferencias de opinión se intentaron atajar cuando se licitaron las obras, el concejal de distrito se reunió con vecinos y representantes de la Asociación Vecinal de Retiro Norte. “En esa reunión quisimos dejar claro que este no es el mismo proyecto de hace años”, relata la presidenta, “se ha limitado el ámbito de actuación a Doce de Octubre y no a Narváez, las plazas van a ser para residentes y se elevan varios pasos de cebra”, añade. Sin embargo, la asociación no ha promovido ningún tipo de movilización al respecto, algo que sí que han hecho los vecinos de forma particular. Pancartas por las calles, concentraciones o pintadas en el asfalto han sido algunas de las formas en las que la vecindad de esta calle del barrio de Ibiza ha mostrado su indignación por las obras.
Vecinos y asociación coinciden en que no han actuado de la mejor manera y deberían haber informado a los vecinos. Las obras van a continuar adelante, ya que cuentan con un estudio previo de movilidad para valorar la conveniencia de esta reforma y se ha obtenido un informe positivo que considera conveniente llevarla a cabo. “Es una calle muy tranquila en la que apenas hay tráfico, se podía perfectamente reducir los carriles de uno a dos”, explican desde la Junta. La calle del Doce de Octubre contará con un solo carril a finales de año, a pesar de las quejas de los vecinos.