A pesar de la inusual Navidad que viviremos este año por los contagios por Covid y las precauciones que debemos tomar, algunas tradiciones van a seguir presentes en los hogares. Una de ellas es el roscón de Reyes, haya o no niños en casa. Un delicioso dulce que puede encontrarse en sus diferentes variedades y sabores, y que podemos degustarlo en cualquier momento del día.
Esta tradición que comenzó ya en el siglo II a.C como parte del festejo pagano en honor a Saturno, ha ido cambiando a lo largo de los años pero sigue manteniéndose viva en nuestro país. De hecho, en un principio contenía otros ingredientes y la sorpresa no consistía en las actuales figuras de cerámica y plástico resistentes al calor, sino que comenzó habiendo tan sólo un haba (símbolo entonces de la prosperidad y la fecundidad) a la que siglos más tarde se le sumó la introducción de una monedas de oro con las que premiar a los afortunados y, finalmente, las figuras actuales.
Si bien es cierto que ya no se utilizan tanto los higos y los dátiles tan predominantes en esos primeros roscones, sí que siguen conteniendo los mismos ingredientes principales. Hoy día se preparan múltiples versiones de este dulce tradicional para poder conquistar los más pequeños de la casa, que suelen preferir las variedades donde predomina la nata, la crema o el chocolate en su relleno.
En Ahorramas han lanzado varias opciones con las que hacer las delicias de tus amigos y familiares esta Navidad. En sus supermercados puedes encontrarlos rellenos de fruta, nata y crema pastelera con una fina cobertura de chocolate; rellenos de turrón blando; o incluso versiones sin azúcar para los que no quieran cuidarse sin renunciar a este capricho navideño.
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