El Ayuntamiento de Madrid va avanzando hacia la configuración de esta gran APR de Centro, que solo permitirá el acceso a residentes, comerciantes o arrendatarios de garajes y personas autorizadas por estas, carga y descarga y servicios básicos. La medida, incluida en el Plan de Calidad del Aire que prepara el Ayuntamiento, busca una reducción de la contaminación, así como hacer más habitable el Centro para los vecinos. El eje central de la APR será la Gran Vía, en proceso de reforma para destinar más espacio al peatón y las bicicletas. Finalmente, tendrá el mismo uso que el resto de las calles de la APR, es decir, no supondrá una excepción que permita cruzar la ciudad por este eje. También se prevé una reducción de la velocidad máxima.
Junto a las obras de Gran Vía, también se ejecutarán otras reformas para adecuar el diseño de las calles a los nuevos usos, según ha explicado el concejal presidente de Centro, Jorge García Castaño, a Madridiario. Hay proyectos previstos para el barrio de Chueca, que comenzará en breve; en el eje Atocha-Jacinto Benavente, a punto de ser licitado; algunas actuaciones de semipeatonalización en la calle de la Palma y San Vicente Ferrer (Masalaña); y también la reforma del eje Duque de Alba-Magdalena (Lavapiés), que actualmente sirve para cruzar la APR de Embajadores y provoca, sobre todo, en la calle Magdalena, una gran densidad de tráfico y problemas para la movilidad peatonal.
En general, la apuesta pasa por hacer calles con pavimento continuo y más espacio para el peatón. Además, se ejecutarán otras obras menores en diversas calles relacionadas con la accesibilidad y la seguridad en cumplimiento de la normativa. Para la próxima legislatura, se prevé actuar en las plazas traseras de la Gran Vía, para lo que se ha convocado un concurso de jóvenes arquitectos.
Otro de los cambios que se prevén es una reordenación del aparcamiento, eliminando aparcamiento en línea y juntando plazas en batería en calles con más capacidad, con el objetivo de concentrarlos. En superficie, el espacio de aparcamiento será para los residentes y también se pondrá a disposicion de los mismos el aparcamiento subterráneo de Santo Domingo, actualmente cerrado.
Tecnologías para informar sobre los aparcamientos
El Ayuntamiento también quiere pontenciar algunos aparcamientos subterráneos públicos y privados para la puesta en marcha de la APR. Además, se trabajará en la mejora informática de los mismos de tal manera que puedan ofrecer en tiempo real los datos de ocupación, lo que permitiría a los vehículos no autorizados que acudan a Centro en busca de una plaza de aparcamiento saber si podrán aparcar. En las APR está permitido acceder si se va a un parking de rotación y las multas se anulan cuando las cámaras de los aparcamientos captan al vehículo. Esta información en la nueva APR central se podrá obtener de las pantallas de información que está instalando en la calle el Ayuntamiento en las zonas cercanas al trazado de la APR. Además, el Ayuntamiento prevé mejorar los datos abiertos de la capacidad de los aparcamientos en tiempo real para que puedan ser utilizados por las aplicaciones de movilidad, como Moovit.
La previsión es que la APR entre en funcionamiento a principios 2018, tras la modificación del contrato del que dependen las APR. Actualmente existen cuatro (Embajadores, Cortes, Letras y Ópera), todas ellas incluidas en el distrito Centro. Con este nuevo trazado que coincidirá con los límite del distrito Centro, se pretende que, además de extender la medida, su contorno sea más intuitivo para los conductores, al coincidir con las grandes rondas y bulevares.