La federación de Escuelas Católicas de Madrid celebró este jueves por la tarde la primera de sus asambleas anuales, dedicadas a directores, titulares y equipos titulares de los centros de su formación, de cara al curso 2015/2016. Entre otros asuntos, se pusieron sobre la mesa la necesidad de reformas claras en la legislación sobre conciertos educativos, la financiación de los centros, la libertad de enseñanza y la aplicación de la LOMCE.
Asamblea anual de la federación de Escuelas Católicas de Madrid (Foto: Kike Rincón)
El evento, celebrado en el Colegio Divina Pastora, estuvo presidido por el secretario general nacional de la formación, Juan Carlos Pérez; la presidenta de Escuelas Católicas Madrid, sor Concepción Viviente; y el consejero de Educación de la Comunidad de Madrid, Rafael Van Grieken. Asimismo, acudieron representantes de alrededor de 350 colegios, representantes empresariales y sindicales del sector, y de la confederación de padres Concapa.
Entre otros temas, la jornada versó de las modificaciones que supone la implantación de la LOMCE. En concreto, sobre los incrementos de ratio para el desdoble de la asignatura de Matemáticas en tercero, y las pruebas de nivel de sexto de Primaria. También se plantearon las previsiones sobre los conciertos con la administración en la escuela y la formación profesional, así como la ratio de alumnos por aula en los segundos cursos de la FP Básica. También se especificaron detalles de las titulaciones del profesorado y se abundó sobre la Ley de Presupuestos Generales de la Comunidad de Madrid.
En materia de programas internos, se expusieron los programas de los XXVII juegos deportivos de ECM, el desarrollo de los programas de Innovación 43.19, el programa de Artes y el proyecto de especialización en Liderazgo Educativo en centros en proceso de cambio e innovación. También se anunció el VI Congreso Nacional sobre Bilingüismo de ECM, que se celebrará el 26 de octubre y la participación de la entidad en SIMO Educación el 28 de octubre, con la mirada puesta en el fomento del uso de las TIC.
Durante el acto, Viviente, representante de un colectivo de más de 350 centros que forman a unos 320.000 alumnos, planteó que el sector educativo y, en concreto, las escuelas católicas, se encuentran ante un cambio de ciclo, en el que celebran el "semblante de diálogo y mesura" que está mostrando el nuevo equipo de la Consejería de Educación, a quien mostró su disposición. Reivindicó al consejero la reglamentación del régimen de conciertos, la mejora del decreto educativo de 1985, la dignificación del módulo económico, el incremento de las dotaciones para apoyo y orientación escolar y, en resumen, la financiación adecuada para dar la asistencia educativa y asistencial necesaria y gratuita a los alumnos de la Comunidad. Asimismo, agradeció la labor de los últimos ocho años a Emilio Díaz, que cesó la semana pasada como secretario regional de Escuelas Católicas en Madrid y que desempeñará el cargo de manera interina hasta que haya un sustituto, compatibilizándolo con el de responsable de relaciones institucionales y comunicación de la institución.
Por su parte, Van Grieken agradeció la labor de los centros concertados y privados, cuya labor de formación se extiende a alrededor de la mitad del alumnado (36 por ciento los concertados y 14 por ciento los privados, aproximadamente). Hizo una encendida defensa de la libertad de enseñanza, en la que los padres son los responsables de la educación de sus hijos, del área única de enseñanza, de la igualdad de oportunidades para todos los alumnos y de los proyectos propios de cada centro. Abogó por implementar un acuerdo por la transformación educativa en Madrid, en la que participen políticos, docentes, familias y estudiantes. Por último, avanzó que el Gobierno regional abordará las discusiones pendientes en materia de normativa de conciertos.