El pasado mes de octubre arrancaba la 'operación Bunici' tras recibirse una denuncia de un octogenario. Explicaba que dos mujeres de nacionalidad rumana le habían abordado en la calle "haciéndole carantoñas, ofreciéndole incluso mantener relaciones sexuales". Al marcharse se había dado cuenta de que le habían robado la cartera.
Los agentes cruzaron información y se percataron de más hechos similares en Valdemoro, en los que dos mujeres se acercaban a personas de avanzada edad y, bien solicitando firmas para una asociación de sordomudos o pidiendo información sobre dónde estaba ubicada Cáritas, aprovechaban la confusión de sus víctimas para hurtar sus pertenencias.
En caso de que la víctima fuera mujer, les abordaban dándoles un abrazo para sustraer, si llevaban, la medalla de oro que llevaban al cuello. A los hombres les realizaban tocamientos a los hombres en su zona genital para arrebatarles la cartera. Un testigo pudo aportar datos de un vehículo donde las dos mujeres huían junto a un hombre. Tras lograr identificar a los presuntos autores, se localizó un domicilio en Madrid capital donde residía una de las parejas que participó en los hurtos investigados. Se procedió a su detención y se recuperaron parte de los efectos sustraídos. La otra pareja era interceptada en el paso fronterizo de la Junquera en diciembre.
Hasta el momento, los agentes vinculan a los detenidos con siete hurtos, si bien se están investigando otros once más al compartir modus operandi. Tras ser puestos a disposición de la autoridad judicial, los detenidos ingresaron en prisión.
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