"En las calles de Madrid, de Alcalá de Henares o de Getafe, el acento ucraniano es hoy acento madrileño". Así ha comenzado su intervención Isabel Díaz Ayuso, que ha planteado una copiosa batería de medidas para todos los ucranianos que lleguen a Madrid como refugiados a causa del conflicto armado entre Rusia y su vecina Ucrania. Según la presidenta regional, la Comunidad de Madrid va a poner todos los recursos posibles para garantizar que aquellos ucranios que lleguen a la capital tengan sus necesidades mínimas cubiertas: alojamiento, escolarización de menores, idioma o transporte.
Así, el alojamiento será organizado por la Agencia de la Vivienda Social que ofrecerá a aquellas familias de refugiados que puedan llegar a Madrid un lugar donde habitar. Aquí incluye la presidenta disponer de cualquier vivienda pública vacía, viviendas prefabricadas, comedores sociales o, incluso, crear convenios con hoteles privados en caso de necesidad. En cuanto a la acogida de los menores que puedan venir con familia pero no con sus tutores legales, Díaz Ayuso ha asegurado que será la Administración regional la que se hará cargo de su tutela provisional a través de los centros de menores. Además, garantizará su escolarización. En cuanto a otro tipo de servicios que puedan ser de utilidad para los eventuales refugiados, se facilitará de forma "gratuita e ilimitada" una tarjeta de transporte a cada individuo y se ofrecerán cursos de español para mejorar la integración de estas personas.
El Zendal, posible "centro logístico"
La jefa del Ejecutivo regional ha ofrecido al Gobierno central la posibilidad de usar el Hospital de Emergencias Enfermera Isabel Zendal como un "centro logístico" con una capacidad enorme para hacer acopio del material que tanto las familias ucranianas afincadas en España como los propios españoles están enviando a Kiev: "Este puede ser un gran centro para, de manera logística, recogerlo y trasladarlo a Ucrania".
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