Una multitudinaria manifestación ha colapsado este viernes 8 de Marzo, Día Internacional de la Mujer, el centro de Madrid bajo el lema 'Somos imparables, Feministas siempre' para clamar por la igualdad entre hombres y mujeres.
La masiva marcha, que ha arrancado a las 19 horas desde la plaza de Neptuno, ha avanzado lentamente hacia Plaza de España, donde se ha montado un escenario. Así, con dificultades por la abundancia de gente y pidiendo en reiteradas ocasiones que se echaran hacia los laterales, la cabecera ha logrado bordear la plaza de Cibeles y entrar a Gran Vía. Pero, una hora y media después del inicio, todavía empezaban a caminar manifestantes desde Atocha.
Según estimaciones policiales, la cifra de participación supera las 350.000 personas y la Comisión 8M, convocantes de la huelga, han destacado que "Madrid está colapsado". "Para que luego digan que somos 100.000, aquí estamos más de un millón de feministas", han proclamado desde el 8M: "Hemos parado Madrid".
Con todo, las cifras de este año doblan las de 2018, cuando la Delegación del Gobierno habló de unas 170.000 personas y las convocantes, de más de medio millón.
Este año, por ejemplo, una de las asistentes que se encontraba esperando el paso de la manifestación en Gran Vía, frente al Círculo de Bellas Artes, explicaba que, pese a vivir en Atocha, ha tenido que rodear todo el centro de Madrid para llegar a una zona del recorrido de la manifestación porque en el inicio "no cabía nadie más".
Detrás de la multigeneracional y multiracial cabecera asomaban pancartas que señalaban la procedencia diversa de las asistentes. También banderas como la arcoiris y la del colectivo 'trans'.
"Tomada por las feministas"
"¡Desde Plaza de España hasta Atocha la ciudad está tomada por las feministas!", han proclamado al traspasar Cibeles, recordando a las jornaleras, las pensionistas, las inquilinas, y las migrantes entre otros colectivos. "¡Estamos escribiendo esta página de la historia todas juntas!", han proclamado las voceras.
"Vamos a llegar a Gran Vía, que está llena de tiendas que cosifican nuestro cuerpo", han dicho las voceras por megafonía, que ha provocado un cántico entre la multitud de mujeres: "¡La talla 38 me aprieta el chocho!". Además, entre las consignas más coreadas no ha faltado el 'No es No', habitual durante las manifestaciones contra la sentencia de 'La Manada' que tuvieron lugar durante 2018. "Sola borracha quiero llegar a casa", se ha exclamado también.
En este sentido, la cabecera ha marchado con ambiente de festival. Cuando las mujeres que hablaban por megafonía descansaban, sonaba música para mantener la 'temperatura' de la marcha.