Este sábado se inauguró en Chueca la nueva Plaza de la Memoria Trans, un recuerdo para todas aquellas personas que han sufrido y sufren por su condición en ámbitos como la educación, la sanidad o el trabajo.
La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, inauguró este sábado la nueva Plaza de la Memoria Trans situada en el barrio de Chueca, en la calle de San Gregorio esquina con la calle de San Lucas, donde ha llamado a "impedir que Madrid vuelva al pasado".
Carmena defendió el carácter de Madrid como "una ciudad abierta" y manifestó su deseo de que "el futuro haga olvidar todo lo que se hizo sufrir a tantas personas simplemente por tener una particularidad en su manera de amar, de elegir sus parejas".
"La Memoria Trans es la historia de una lucha, una lucha por conseguir que los seres humanos sean felices", señaló la regidora en la colocación de la placa con el nombre de la nueva plaza, al tiempo que destacó la importancia de que "esa memoria pueda contarse".
La alcaldesa estuvo acompañada por el concejal del distrito de Centro y delegado de Economía y Hacienda, Jorge García Castaño, la presidenta del Colectivo de lesbianas, gais, transexuales y bisexuales de Madrid (COGAM), Carmen García de Merlo, la primera teniente de alcalde, Marta Higueras, y la portavoz del Grupo Socialista Municipal, Purificación Causapié.
Asimismo, en el acto tuvieron cabida testimonios como el de Carmen, que expuso los campos en los que los transexuales siguen estando discriminados "por falta de conocimiento", como en la educación, la sanidad y el trabajo, donde muchos se ven abocados al "trabajo sexual".
Además, denunció los delitos de odio que a día de hoy se siguen produciendo y reivindicó "cambios en la autodeterminación", frente al "modelo binario".
Igualmente, recordó que esta plaza iba a recibir el nombre de Alan, un joven que se suicidó por su condición, pero al final la Junta de Gobierno decidió el nombre de 'Memoria Trans' para honrar a todas las personas discriminadas.
Causapié destacó la necesidad de seguir trabajando para erradicar los delitos de odio hacia este colectivo porque "todavía viven una situación de mucha discriminación", como por ejemplo en el acceso al empleo, a recursos sociales y a posición de liderazgo en nuestra sociedad.
De esta forma, la portavoz declaró que cree que "no se está siendo suficientemente valiente por parte de las instituciones ni los poderes públicos para hacer políticas que cambien esa realidad de discriminación".