El Museo Thyssen-Bornemisza acoge una exposición retrospectiva sobre el artistas francés Balthus, hasta el 26 de mayo, en la que están representadas sus famosas 'lolitas'.
La exposición, primera monográfica que se presenta en España en más de 20 años, reúne 47 obras, en su mayoría pinturas de gran formato, que cubren todas las etapas de su carrera desde la década de 1920.
La selección incluye algunas de sus obras más importantes como 'La calle' (1933), que se verá en España por primera vez, 'La toilette de Cathy' (1933), 'Los hermanos Blanchard' (1937), Los buenos tiempos' (1944-1946) 'Thérèse' y Thérèse soñando', ambas de 1938, ejemplos de sus "polémicos" retratos de jóvenes adolescentes.
Balthus (París, 1908 - Rossinière, 2001), hijo del historiador del arte y pintor Erich Klossowski y de la también artista Elisabeth Dorothea Spiro, nació en París en 1908 y creció en el ambiente intelectual y artístico de la ciudad, donde se habían instalado sus padres unos años antes.
La primera exposición individual de Balthus, en 1934, constaba solo de siete lienzos, pero fueron suficientes para convertirse en toda una revelación. Sus imágenes pintadas a la manera tradicional, pero alejadas de las corrientes figurativas de la época, estaban cargadas de implicaciones psicológicas y de misterio.
Balthus buscaba provocar. Sus cuadros narrativos son auténticos dramas psicológicos teatralizados, escenas íntimas o tragedias domésticas que se representan una y otra vez ante la mirada del espectador. La escasa profundidad del espacio pictórico, la paleta restringida y dramática, el exagerado sentimiento de lo clásico, sus figuras sugerentes, llamativas, el erotismo velado o latente o la violencia implícita, según recuerda el museo.
Balthus era conocido por trabajar despacio y durante mucho tiempo en cada una de sus pinturas, y tenía empezadas varias al mismo tiempo. En 1936 expone por primera vez en Londres y en 1938 en los Estados Unidos. Cuando estalla la guerra es llamado a filas, pero un año después fue excluido del ejército por motivos de salud. Al final de la década de 1940 su prestigio artístico estaba plenamente consolidado.