Los ocho vecinos confinados dentro del inmueble del número 23 de la calle Santístima Trinidad, en el distrito de Chamberí, tras el desplome esta mañana de las pasarelas interiores que conectan las dos alas del inmueble han comenzado a salir de sus casas después de que los bomberos hayan instalado un andamio provisional para desalojar el edificio en condiciones de seguridad.
Los vecinos de la vivienda de la parte interior del edificio han podido salir por su propio pie pasadas las 19:30 horas, portando maletas asistidos por los bomberos del Ayuntamiento de Madrid.
Del mismo modo, también han podido acceder a sus viviendas para recoger sus enseres personales los moradores que en el momento del derrumbe se encontraban fuera del edificio.
Según el oficial jefe de guardia de los Bomberos municipales, José Luis Legido, se desconoce el motivo del desplome ya que "las causas pueden ser múltiples porque en vivienda de cierta antigüedad como esta hay elementos de construcción que son difíciles de determinar".
Por el momento, los vecinos de las viviendas del interior afectadas (14 viviendas) por el desplome de las pasarelas no podrán volver a la vivienda, por lo que el Samur Social les ha ofrecido una alternativa habitacional si así lo requieren. A su vez, los otros vecinos que residen en la parte exterior del inmueble (otras 14 viviendas) sí podrán acceder a ella aunque no hay suministro de gas y agua en todo el edificio.
El Samur Social ha ofrecido alternativas habitacionales a los residentes y 13 de ellos (tres personas individuales y dos familias compuesta por tres integrantes cada una y otras dos con dos miembros, respectivamente) de siete viviendas las han aceptado.
Por otro lado, los andamios provisionales estarán montados hasta mañana y los residentes que así lo deseen podrán entrar en sus casas en horas determinadas para recuperar más enseres.
Las obras de reparación tienen que correr a cargo de la propiedad del inmueble o la comunidad de vecinos. Según la versión de varios residentes, el inmueble había pasado la última Inspección Técnica de Edificios (ITE).
Una de las vecinas que se encontraban encerradas en el interior de su vivienda ha declarado que las casas se encontraban en perfecto estado. Igualmente, un vecino de la parte interior que ha vivido los hechos ha relatado que oyeron un fuerte estruendo y al abrir vivienda solo vieron polvo, por lo que volvieron a refugiarse en sus casas.