No habrá prohibición del uso de fincas rurales para celebrar bodas o bautizos. La Asamblea de Madrid ha tumbado este miércoles la propuesta de PSOE y Podemos para derogar la normativa que lo permite. Ante la sorpresa de la izquierda, Ciudadanos ha sumado sus votos a los del PP, que presentará su contrapropuesta la próxima semana.
El Pleno de la Asamblea de Madrid ha rechazado este miércoles la Proposición de Ley de PSOE y Podemos para prohibir la organización de celebraciones -bodas o bautizos, por ejemplo- en fincas rurales con 65 votos en contra frente a 59.
Ambos partidos pretendían eliminar el artículo 9 de la Ley de Medidas Fiscales y Administrativas, creado por el PP de Ignacio González hace cinco años, que permite a través de una licencia municipal "la celebración de actos sociales y eventos familiares de especial singularidad" -así como los usos caninos y ecuestres- en suelo "no urbanizable con cualquier protección y suelo urbanizable no sectorizado".
Cs se decanta
Tras ocultar sus cartas hasta el último momento, Ciudadanos (Cs) ha terminado por mostrarse contrario a esta derogación al entender que la propuesta escondía una modificación "quirúrgica" de la Ley del Suelo.
El portavoz Enrique Veloso ha ironizado que la intención de las formaciones de izquierda fuera "castigar a determinados dueños y terratenientes por el mero hecho de que sean marqueses o exministros" en lugar de hacer un "análisis" de la situación.
Ciudadanos ha respaldado implícitamente así la contrapropuesta que el PP pretende llevar al Pleno de la próxima semana para especificar la barra libre de ese artículo 9 en lugar de derogarlo.
Jurassic Park y los hoteleros
Podemos ha calificado la situación de "sainete en dos actos" y ha pedido sin éxito a los de Ignacio Aguado que reconsideraran la "justa reivindicación de los colectivos ecologistas y la hostelería". Los dos partidos pretendían acotar el "impacto medioambiental" de estos usos y el "agravio" para restauradores, cuyos representantes sectoriales han acudido a la tribuna de invitados.
La portavoz 'morada', Laura Díaz, ha defendido el cambio normativo para impedir estas celebraciones y que "a algún grande de España se le antoje montarnos el Jurassic Park en su finca". En declaraciones ante la prensa, Díaz ha dicho no entender el súbito movimiento de Ciudadanos, que había participado en las reuniones con empresarios y había colaborado hasta el último momento en la redacción del texto.
Desde el PSOE, Agustín Vinagre, ha denunciado que el articulado actual favorece la "competencia desleal frente al resto de empresarios que han realizado todos los trámites" y ha recordado varias sentencias judiciales sobre estas actividades "contrarias al interés público". A su juicio, la flexibilidad actual solo ha servido para la "proliferación" de actividades "sin control" con afecciones al medio ambiente sin que hayan favorecido "el desarrollo rural sostenible", tal y como preveía la norma.
La calle del medio del PP
Luis del Olmo, del PP, ha replicado que los ciudadanos "no deben ir al infierno por desear celebrar esos eventos" en "un escenario natural".
El parlamentario ha criticado que la propuesta de Podemos y PSOE pretendiese prohibir cualquier uso en estos suelos. "Entre prohibirlo absolutamente todo y autorizarlo todo, existe un camino en medio", ha afirmado.
"Hay espacios donde se pueden desarrollar determinadas actividades. No estamos a favor de que se hagan actividades en cualquier escenario", ha indicado antes de asegurar que su propuesta permitirá igualmente este tipo de celebraciones en fincas con inmuebles protegidos.