Carlos Izquierdo, consejero de Políticas Sociales y Familia, ha asistido a la reunión con el objetivo de tratar los
desafíos relacionados con la inmigración en la
Comunidad y para pactar medidas que mejoren la formación de la población inmigrante que reside en la región, con el objetivo de fomentar su integración en la sociedad y en el mercado de trabajo. "Queremos conocer la realidad: hay que afrontar nuevos retos como la
educación, las
segundas generaciones y la
empleabilidad", ha declarado el consejero.
Izquierdo ha afirmado que la Comunidad se ha convertido en un
"referente" en política de inmigración. "La situación ha cambiado. Antes la Comunidad era un sitio de acogida y ahora los inmigrantes ya han llegado, se les ha acogido, se les ha integrado y se han creado nuevos retos que queremos resolver", ha explicado el consejero.
Entre las medidas que pretende llevar a cabo el Gobierno regional se encuentra el
refuerzo de los cursos de español que se imparten en los
CEPI (Centros de Participación e Integración) y en los
CEPA (Centros de Educación para Personas Adultas), y la
optimización de la oferta de cursos de formación para empleo dirigidos a inmigrantes en situación de desempleo.
El consejero también se ha referido a la
Estrategia de Inclusión de la Comunidad de Madrid 2016-2021, recientemente aprobada por el Consejo de Gobierno: "Eestamos trabajando de cara a los inmigrantes. Queremos prevenir posibles situaciones de exclusión social entre la población más vulnerable".
Respecto a los
22 refugiados que el Ayuntamiento de Madrid pretende traer, Izquierdo ha declarado que la Comunidad acoge a todos los refugiados "por igual". "El Ayuntamiento
tiene que trabajar con el Ministerio de Exteriores para conseguir los visados. Si los obtienen, se atenderá a los 22 refugiados igual que a los demás", ha concluido el consejero.