Joshua Coombes viaja por todo el mundo tratando de visibilizar las historias que hay detrás de las personas que viven en la calle, a quien corta el pelo no solo porque lo necesiten sino "para que la gente se pare y les preste atención". Este miércoles ha visitado la Gran Vía madrileña, donde su labor ha despertado la admiración de los transeúntes.