La piscina del Centro Deportivo Municipal Vicente del Bosque no se llenará este verano. Tampoco acogió bañistas en 2022 y los vecinos urgen a la Junta Municipal de Fuencarral-El Pardo a subsanar las deficiencias del vaso principal mientras crece entre ellos una sospecha: la posible privatización del centro. Temen que el Ayuntamiento ceda la gestión a una empresa privada a cambio de que asuma los costes de las reformas y el mantenimiento de todas las instalaciones, una idea que ha generado la creación de una plataforma de afectados formada por diversas asociaciones vecinales de todo el distrito y dispuesta a protestar. Por su parte, el Consistorio niega que esté planeando dicha privatización, asegura que no tienen calculado el coste de las obras y se limita a decir que "se va a encargar un proyecto para estudiar las necesidades del centro".
"Hemos conocido que la piscina va a seguir cerrada este año porque nos han dicho desde el Ayuntamiento que no tienen capacidad para hacer un mantenimiento efectivo y el concejal-presidente del Distrito Fuencarral-El Pardo, Francisco Javier Ramírez Caro (PP), considera que una entidad privada sí tiene esa capacidad". Este es el problema fundamental que ha hecho saltar las alarmas de diferentes asociaciones de vecinos, como la de Begoña, cuya tesorera es Pilar Martínez.
"Buscan una excusa para un fin"
"Sospechamos de los planes del Ayuntamiento cuando vemos que los problemas se agrandan, cuando se dice de palabra que hay presupuesto pero que nunca aparece, cuando pasan dos veranos cerrados y cuando de repente nos confirman que no hay presupuesto para mantener las instalaciones. Es buscar una excusa para tener un fin", asegura Martínez, impulsora del recién creado Grupo Vecinal Vicente del Bosque, que se dedicará a protestar contra esta supuesta intención del Gobierno municipal. A pesar de que fuentes de Cibeles aseguran que no está encima de la mesa la concesión a una empresa privada, esta plataforma se ciñe a las declaraciones del concejal popular en las sesiones plenarias de la Junta de Distrito y a otras informaciones a las que han tenido acceso.
De hecho, aquí surge una discrepancia en la información. Por un lado, los vecinos aseguran que fue el propio concejal Ramírez quien cifró en "50 o 60 millones" la cantidad de dinero para la supuesta privatización; por otro, fuentes oficiales del Ayuntamiento niegan que exista ningún tipo de estimación y solo confirman que se ha encargado un "estudio de las necesidades del centro".
Vecinos temen un aumento de costes "inasumible"
La Asociación Vecinal La Flor elevó la semana pasada al Pleno del distrito una propuesta para que la Dirección General de Arquitectura y Conservación del Patrimonio realice en el menor tiempo posible los informes pertinentes sobre el estado del polideportivo en su conjunto, en el que se ubican pistas multideportivas que también requieren obras de reforma.
La petición de los residentes en la zona en la sesión plenaria de este miércoles fue clara: "Instar a quien corresponda para disponer de la partida presupuestaria necesaria para la corrección de todas las imperfecciones y reparaciones, con el suficiente tiempo y recursos para para facilitar que las vecinas y vecinos de los barrios que dependen de estas piscinas puedan superar las terribles temperaturas que se esperan en Madrid este verano de 2023, además de disponer en buen estado del resto de las instalaciones existentes". Se refieren en este último punto a los desperfectos que tanto usuarios como el club de patinaje del barrio llevan denunciando en las instalaciones desde hace un lustro. "El pabellón no está mal, pero las pistas exteriores de pádel, patinaje, fútbol o baloncesto necesitan arreglos", indica Óscar Chacón, miembro de La Flor.
Sin embargo, a pesar de que salió adelante en la votación, desde la AV de Begoña y desde la plataforma desconfían plenamente de los efectos de dicha moción. "No son vinculantes. Instar se puede instar pero la realidad es que para nosotros eso no es ningún compromiso, es propaganda", critica Pilar Martínez.
A la incertidumbre por no saber cúando podrán volver a usar la piscina de referencia del barrio se suma la desconfianza general de que la acometa una empresa privada. Según trasladan desde la asociación La Flor, en concordancia con la AV de Begoña, la Junta ha deslizado "varias veces" que una compañía estaría interesada en "poner sobre la mesa bastantes millones para arreglar las instalaciones". "Hablan de que se necesitan 50 o 60 millones porque podría haber defectos en la estructura del edificio", cuentan los vecinos, sorprendidos porque la inversión habitual en una obra nueva de estas características suele costar 10 veces menos. Les preocupa, además, "qué pedirán a cambio" desde la iniciativa privada teniendo en cuenta precedentes de otros polideportivos "en los que dejan solo lo que es rentable y se cargan el resto, dejando sin sitio a los clubs de base".
En este punto, lamentan desde el Grupo Vecinal Vicente del Bosque que si se llega a privatizar el centro podría "imposibilitar" su uso por una parte muy importante de los vecinos ya que "no tienen grandes capacidades económicas", debido a la posibilidad de que aumenten los costes para disfrutar de las instalaciones deportivas en caso de que los acabe gestionando una empresa.

Se repiten los "parches" para el verano de 2023
Los problemas con la piscina exterior surgieron hace ya cinco años. "En el último en el que estuvo abierta, en 2021, recogimos firmas porque el agua estaba muy fría", apunta Óscar Chacón, presidente de AV La Flor. ¿El motivo? Grietas "muy serias" por las que el agua de la pileta se renovaba de forma continua. Así, dos inconvenientes en el frente: el derroche de agua y unas condiciones que no invitaban al baño. La Junta se comprometió en diciembre de 2021 a solicitar los estudios técnicos necesarios para poder ejecutar la rehabilitación de la infraestructura, pero "más de un año después seguimos igual", indica el colectivo vecinal.
"Nos confirman que no hay presupuesto"
El Ayuntamiento de Madrid parcheó esta situación en 2022 con "apaños" que los vecinos de La Paz no quieren repetir en apenas unos meses pero que tendrán que afrontar el próximo verano ya que el Consistorio ha confirmado que se repetirá la misma solución. Así, tal y como ocurrió en 2022, la alternativa al cierre de la piscina exterior de Vicente del Bosque será abrir la climatizada, así como la cubierta del Centro Deportivo Municipal La Masó. De nuevo, al igual que durante el verano anterior, la Empresa Municipal de Transportes prestará un servicio especial gratuito entre el polideportivo y Hortaleza a fin de facilitar el acceso a sus piscinas. "Para una emergencia esto está bien", manifiestan desde la AV La Flor, pero no consideran que sea una solución. La más cercana, la de Santa Ana, tampoco estuvo operativa en 2021 y el año pasado empezó a funcionar en julio y no en mayo como el resto de las de la red pública municipal. Con todo, los vecinos se han cansado de desplazamientos. "Fuencarral es el distrito más grande en extensión, hablamos de que las distancias son muy largas", recuerda Óscar Chacón.
Afean a la Junta "falta de transparencia" y advierten de que si no se remedia "tendrán contestación vecinal". Por el momento, ya han iniciado una recogida de firmas con el objetivo forzar a la Administración a que "no se duerman y agilicen la reforma" de la piscina y las pistas del CDM Vicente del Bosque. "Seguiremos con una campaña de movilizaciones hasta que haya un compromiso", aseveran, a la vez que estudian un calendario de movilizaciones y acciones de protesta para evitar tanto la supuesta "privatización" como para reivindicar mejores servicios públicos y deportivos.