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Madrid cobrará 59 euros de media como tasa de basuras

Madrid cobrará 59 euros de media como tasa de basuras

Por Enrique Villalba
viernes 17 de octubre de 2008, 00:00h
El Ayuntamiento de Madrid ha presentado este viernes dos nuevas Ordenanzas: la de Limpieza de los Espacios Públicos y de Gestión de Residuos, y la Ordenanza Fiscal Reguladora de la Tasa por Prestación del Servicio de Gestión de Residuos Urbanos o Municipales, que grava el coste de la prestación de este servicio. Los delegados de Medio Ambiente, Ana Botella, y de Hacienda, Juan Bravo, explicaron estas dos novedades legislativas que innovan la antigua normativa, vigente desde hace 23 años.
Bravo analizó en profundidad la nueva tasa, que, según su criterio, viene derivada de la actual crisis económica, del descenso de los impuestos vinculados a la actividad inmobiliaria y al descenso de la aportación del Gobierno central a los ayuntamientos. El edil aseguró que la medida se debe a que, en la actual situación económica, esta cuota, que se había suprimido, "es justa, necesaria y razonable".

El nuevo y único impuesto que impondrá el Consistorio en 2009 establece una cuota en función de la capacidad económica (valor catastral) de cada unidad domiciliaria en los 1.964.747 viviendas de Madrid. La tasa es progresiva. Es decir, cuanto más valor tenga la vivienda, más se paga, y viceversa. Una casa de 90 metros cuadrados, la vivienda tipo en la ciudad, pagará 59 euros de media y más de 806.000 viviendas madrileñas pagarán una cantidad inferior. Es decir, algo más de cuatro euros al mes por casa.

Quedarán exentos de pagar esta tasa las casas que cuenten con un número determinado de personas empadronadas y no se supere un determinado nivel del Indicador Público de Renta (IPREM). En el caso de 2 personas empadronadas, la exención afectará a los que reciban 1,2 veces el IPREM (633 euros al mes); con cuatro personas 1,5 veces el IPREM (790 euros/mes); y cinco personas, dos veces el IPREM (1.054 euros/mes).

Viviendas vacías

Las viviendas vacías también pagarán el impuesto ya que, según Bravo, por jurisprudencia, habitar en la casa no exime del pago de la tasa ya que el servicio se cumple. El impuesto también se aplicará de forma progresiva a los locales con actividades. El 70 por ciento de los comercios, con valores catastrales hasta 75.000 euros, pagarán entre 23 y 95 euros. Aquellas empresas que cuenten con un sistema de recogida debidamente autorizado por la Comunidad de Madrid tendrán exenciones de hasta el 90 por ciento de la tasa, basadas en criterios medioambientales.

Además, habrá exenciones subjetivas que beneficiarán a colegios públicos y concertados, a entidades sin ánimo e lucro y a entidades de investigación. El edil aseguró que si se observa una reducción de los costes de servicio debido a la labor de la población, se reducirá la tasa convenientemente. El precio medio de la tasa es bajo si se compara con los de otras capitales de provincia como Girona, que establece un pago de 132 euros o los 108 euros de Palma de Mallorca. Con este nuevo tributo se pretende pagar el 95 por ciento de los costes de mantenimiento del servicio de recogida de basuras, que asciende a 177 millones de euros. En total, se sufragarían 169 millones.

Historia de la tasa de basuras
La gerente de la Agencia Tributaria, Rosa Ana Navarro, explicó que en 1986, el Ayuntamiento excluyó la tasa de basuras del hecho imponible argumentando que se incluiría en el Impuesto de Bienes Inmuebles, que registraba un aumento del 20 al 28 por ciento. En 1987, el Tribunal Constitucional declaró inconstitucional la Ley que permitió subir este tipo sin límite.

De esta manera, entre 1988 y 1991 el Gobierno municipal tuvo que devolver el IBI cobrado en exceso sin haber cobrado tasa de basuras. Además, en 1989 desapareció la tasa de basuras empresarial, al tiempo que se aprobó un nuevo sistema de financiación local. En 2003, se prohibió utilizar el IBI para absorber el impacto económico por la eliminación de la tasa de limpieza o recogida de residuos.

Por su parte, Botella explicó el proyecto de Ordenanza de Limpieza de los Espacios Públicos y de Gestión de Residuos. La delegada desglosó las actuaciones que va a regir dicha normativa. Se ha contemplado la obligación de separar en origen los residuos y la obligación del Ayuntamiento de recogerlos de forma selectiva (Ley 10/1998 de 21 Abril de residuos). La edil aseguró que se sancionará con hasta 750 euros a los propietarios o comunidades de vecinos que no cumplan con esta prescripción.

Ensuciar la vía pública
Se regularán acciones que no pueden realizarse en los espacios públicos por su incidencia en la limpieza viaria como reparar vehículos, arrojar residuos desde ventanas, dar de comer a animales ensuciando la vía pública, almacenar residuos fuera de los contenedores de obra o abandonar trastos viejos en la vía pública. También se sancionará la introducción de materias encendidas o inflamables en papeleras y contenedores, así como dejar publicidad  en vehículos estacionados.

Se va a endurecer la persecución al grafiti en la capital, que supone, según explica Botella, un gasto de seis millones de euros anuales en materia de limpieza. Entre 2007 y 2008 se limpiaron más de dos millones de metros cuadrados de graffiti, según datos del Área de Medio Ambiente. Las sanciones se incrementarán de 300 a 3000 euros para infracciones leves y de 600 a 6000 euros para las graves. Además, se repercutirá en los autores el coste del servicio de limpieza. Se contemplará el decomiso y destrucción del material incautado y se podrá sustituir la sanción por trabajos en beneficio de la sociedad.

Excrementos caninos
También habrá que tener mayor control sobre los animales de compañía. En 2007, los servicios de limpieza recogieron  1.198,5 toneladas de excrementos caninos. Por eso, los propietarios de los animales tendrán la obligación de recoger las deyecciones en vías y espacios públicos, según la Ordenanza. Se excluirá de esta obligación a las personas invidentes con perro- guía. Además, no estará permitido el aseo y limpieza de animales en los espacios públicos.

En cuanto a los actos públicos, los organizadores deberán garantizar que no se ensucie la vía pública. En 2007 hubo más de 6.000 actos públicos y se espera que en 2008 haya un total de 7.580. Es decir, 20 diarios. Por eso, se podrá exigir fianza con la que se responda de los costes derivados, en su caso, de los trabajos extraordinarios de limpieza. Quedarán excluidos de esta responsabilidad los actos relacionados con el ejercicio de los derechos fundamentales y libertades públicas como manifestaciones y concentraciones. Los residuos de construcción y demolición, se controlarán a través de una homologación municipal de los contenedores y los sacos de obras. Todos los residuos generados deberán ir dentro de estos depósitos y se establecerá la obligación de tapar los contenedores y sacos  entre las 20:00 y las 8:00 horas. No podrán instalarse contenedores ni sacos de obra en días festivos y fines de semana en zonas de interés turístico, zonas de ocio, lugares de celebración de eventos deportivos y el Rastro.

Coches abandonados
Para evitar los vertidos incontrolados, también se regularán los 15 puntos limpios y 104 móviles de la ciudad. Se hará especial hincapié en los elementos electrónicos y aparatos eléctricos. También se tipificará como infracción muy grave el abandono de vehículos en vía pública con hasta 3000 euros de multa. El propietario deberá costear el traslado y estancia en el Depósito Municipal. Con estas medidas, el Ejecutivo municipal trata de responsabilizar a la población en la reducción de residuos para mejorar la gestión de los mismos y prolongar la vida útil del Parque Tecnológico de Valdemingómez.
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