La cirugía plástica ha dejado de ser vista como una solución exclusivamente estética, ya que interviene directamente en poder ganar confianza y autoestima. De entre todas las intervenciones posibles que abarca la cirugía estética, las relacionadas con el pecho de la mujer han sido quizás una de las más populares.
Estas intervenciones pueden ser tanto destinadas a aumentar como a reducir el pecho, posibilitando también la elevación y la reconstrucción mamaria.
El doctor Marco Amaya, del IECP refiere un aumento significativo de las operaciones de reducción de pecho, mientras que las que se realizan para aumentarlo han reducido su número. Esto responde a diversas cuestiones, pero vamos a hacer incidencia sobre la primera, la de reducción de pecho en la mujer.
Reducción de pecho en mujeres: causas
Es evidente que una intervención de estas características nunca responde a ningún tipo de capricho. Son muchas las causas que llevan a una mujer a plantearse una reducción de pecho, siendo estas las más habituales.
Dolores cervicales
Un tamaño grande en los pechos de la mujer puede terminar derivando en dolores en la parte superior de la columna vertebral, lo que puede llegar a ser incapacitante y cuanto menos, muy molesto. Reducir el pecho alivia esta carga sobre la cervicales y los grupos musculares afectados, por lo que la mujer gana calidad de vida y se encuentra mucho menos molesta.
Autoestima
Puede llegar a ser una verdadera tortura para la autoestima de la mujer, que percibe miradas y comentarios muy poco afortunados. Es una de las razones más importantes por las que una mujer puede someterse a una cirugía reductora. Poder ganar confianza y sentirse bien es motivo más que suficiente para plantearse la cirugía de reducción de pecho.
Ganar comodidad
Un pecho grande no ayuda en absoluto a la práctica de actividades deportivas, por lo que la mujer debe tomar las medidas necesarias para reducir este impacto. Pero ya sabemos que el uso de un sujetador que contenga es bastante incómodo cuando se desea practicar deporte de cierto impacto. Por eso, la intervención de reducción de pecho, ayuda a ganar comodidad de aquellas mujeres que practican deporte de manera habitual.
Pechos caídos
Un pecho de gran volumen no tiene la firmeza suficiente y termina cayendo, factor que se acentúa con el paso del tiempo. Por esa razón, la reducción del tamaño de las mamas posibilita que estas presente un aspecto mucho más agradable y se evita la flacidez que produce un pecho de gran tamaño. Evidentemente, esto tiene un efecto muy positivo sobre la autoestima de la mujer qué se somete a la operación.
Sensación de talla inadecuada
Una mujer puede sentir que tiene un pecho grande en proporción al resto de su cuerpo, lo que no le hace estar en consonancia con su propia imagen corporal. La reducción de senos posibilita tener un conjunto mucho más armonioso, con todo lo que eso conlleva. Generalmente, las mujeres que se someten a este tipo de intervención por esa causa ganan muchísimo de autoestima y confianza.
Recuperar la imagen tras la lactancia
También suele ser habitual que, durante un periodo prolongado de lactancia, el pecho haya quedado más caído y con una sensación de flacidez muy poco agradecida. Por esa razón, la operación de reducción de pecho posibilita que la mujer se encuentre mucho más a gusto y tenga unos senos debidamente colocados.
¿Cómo es la operación de reducción de pecho?
La operación de reducción de pecho no solamente responde a los deseos de una mujer, sin que el equipo médico correspondiente dé el visto bueno a esta intervención. En este caso, la cirugía de reducción de senos no es un procedimiento quirúrgico demasiado complicado, pero es importante que conozca todos estos detalles. La duración de la intervención oscila entre los 90 y los 145 minutos, siempre bajo anestesia general y con un periodo de hospitalización de entre 24 y 48 horas.
Es evidente que una intervención quirúrgica siempre es molesta, en el caso de la de reducción de pecho podemos calificarla con ese adjetivo, no siendo dolorosa. En cuanto el equipo médico realiza la evaluación correspondiente, se da el alta y la mujer puede seguir con la recuperación en su domicilio. El tiempo habitual de recuperación es de aproximadamente dos semanas.
Es muy importante para una mujer sentirse bien, y en el caso de un pecho grande, hay que plantearse la posibilidad de abordar la intervención de reducción para poder tener una vida mucho más cómoda. Una visita a la clínica posibilita obtener la mejor información y
conocer las posibilidades de éxito de la intervención de reducción de pecho. Tu vida puede dar un giro muy necesario en el caso de que el tamaño de tus senos te esté impidiendo llevar una vida normalizada, o bien, tengas ya problemas de autoestima. que te estén afectando.