El Reglamento del Congreso de los Diputados define la moción de censura como un procedimiento mediante el que la Cámara "puede exigir la responsabilidad política del Gobierno" con el objetivo de forzar la salida del presidente del Gobierno y elegir un sustituto.
La aprobación de la moción de censura implica que la Cámara expresa su desconfianza al Gobierno y da su respaldo a una opción alternativa. Los 180 síes del Congreso a la moción de censura contra Mariano Rajoy implican, de facto, el apoyo al candidato encargado de elevar la moción: Pedro Sánchez. De modo que el líder socialista se convierte este viernes en el primer presidente del Gobierno de la democracia que llega a la Moncloa sin pasar por las urnas y gracias al procedimiento de la moción de censura, dejando un escenario inédito en el panorama político español.
¿Qué pasos deben seguirse a partir de ahora? La Constitución establece en su artículo 114.2 que "si el Congreso adopta una moción de censura, el Gobierno presentará su dimisión al Rey y el candidato incluido en aquélla se entenderá investido de la confianza de la Cámara a los efectos previstos en el artículo 99. El Rey le nombrará presidente del Gobierno".
Es la presidenta del Congreso, Ana Pastor, quien, inmediatamente después de la votación, tiene que poner en conocimiento del Rey, Felipe VI, el resultado de la moción, para organizar entonces la toma de posesión del presidente del Gobierno en la Zarzuela. La cita ha sido a las 15.30 horas de este viernes y esta medianoche se publicará la resolución en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
Esto permitirá que, como ya se ha confirmado, Sánchez tome posesión de su cargo ante el monarca y un ejemplar de la Constitución. El socialista deberá elegir entre la fórmula del juramento o la promesa en una ceremonia que tendrá lugar este sábado a las 11 en el Palacio de la Zarzuela y tras la que ya podrá nombrar a sus ministros.
¿Qué precedentes ha habido?
La moción de censura presentada por Unidos Podemos en junio del año pasado fue la tercera en la historia democrática de España y no salió adelante ya que solo contó con 82 votos a favor, 170 en contra y 97 abstenciones. Las anteriores tuvieron lugar en 1980, cuando el PSOE presentó una contra Adolfo Suárez, y en 1987, cuando Alianza Popular hizo lo propio contra Felipe González.
La moción que Felipe González presentó contra Adolfo Suárez en 1980 contó con el apoyo de 152 diputados (socialistas, comunistas, andalucistas y tres representantes del grupo mixto) y el rechazo de los 166 diputados de UCD. En la votación se abstuvieron 21 diputados, entre ellos los 9 de Coalición Popular y los 7 de Minoría Catalana. El PSOE se quedó a 24 votos de conseguir la aprobación de la moción de censura.
Más lejos de una mayoría estuvo la moción de censura presentada por Alianza Popular contra el Gobierno de Felipe González en 1987. El candidato a la presidencia presentado por Alianza Popular, Antonio Hernández Mancha, cosechó el voto favorable de 67 diputados (Alianza Popular y Unión Valenciana), mientras que 195 votaron en contra (PSOE, Izquierda Unida y nacionalistas vascos) y 70 se abstuvieron (representantes de CDS y CIU, entre otros).