El presidente de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE), Roberto Fernández, ha respaldado la investigación lanzada por la Universidad Rey Juan Carlos (URJC) para esclarecer la polémica del máster de Cristina Cifuentes. Sin embargo, ha asegurado que su rector, Javier Ramos, que compareció ante la prensa durante la misma mañana que estalló el escándalo, "debería haber esperado" antes de dar explicaciones. El máximo responsable de la universidad madrileña ha solicitado un observador externo a la Conferencia para garantizar la "transparencia" de sus pesquisas.
El presidente de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) y rector de la Universidad de Lleida, Roberto Fernández, ha defendido la "transparencia" de la Universidad Rey Juan Carlos (URJC) en relación a la polémica por el máster de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, aunque ha admitido que "debería haberse esperado un poquito más" a la hora de salir a dar explicaciones públicamente sobre el supuesto error en la transcripción de las calificaciones.
"Es una opinión de alguien que no está viendo los toros desde el redondel, pero no sé si hubiese sido pertinente haber esperado un poquito más", ha explicado Fernández en una entrevista en RNE recogida por Europa Press.
Investigación abierta
Pese a ello, el presidente de la CRUE, que ha asegurado haber estado en contacto con el rector de la URJC, Javier Ramos, se ha mostrado convencido de que la institución madrileña llegará "hasta las últimas consecuencias" para esclarecer lo ocurrido, porque "el buen nombre de su universidad está por encima de cualquier cosa".
Fernández ha añadido que si en la investigación abierta se "detecta alguna supuesta irregularidad el rector la hará pública y las consecuencias serán las que considere pertinentes". "Está haciendo lo que cree que debería hacer y lo que haría yo si fuese en mi universidad", ha insistido.
Asimismo, ha defendido vehementemente la "honestidad y transparencia" de las universidades españolas y de sus responsables. "Ningún rector, ni vicerrector está imputado de nada, somos un colectivo de profesionales que hemos demostrado legalidad a prueba de bomba".
A la espera de las explicaciones
En cuanto al hecho de que haya podido producirse un error en la calificación de Cifuentes, como sostiene la presidenta madrileña y la URJC, ha recordado que en "en 76 universidades españolas, donde hay miles de actas, miles de profesores, es más que probable que en alguna ocasión haya algún error de transcripción que se subsana dentro de la más estricta legalidad". Por ello entiende que "puede pasar que se haya producido por un error humano y que sea subsanado mediante el mecanismo institucional pertinente".
Fernández ha eludido pronunciarse sobre el hecho de que el trabajo de fin de máster de la presidenta madrileña no se haya hecho público por entender que "es un procedimiento que está sub iúdice" y hay que "esperar a que el rector saque las conclusiones oportunas y lo explique públicamente".
Sobre lo que ha incidido el rector de Lleida es en la importancia de que la polémica no desprestigie a la universidad española. "La opinión pública no puede dudar de que las cosas y algo tan importante como los másteres se hacen bien", ha concluido.
Observador externo
El rector de la URJC ha reaccionado a estas palabras y ha solicitado a la CRUE un observador externo para su investigación.
El objetivo, según han indicado fuentes de la universidad, es "promover y ampliar al máximo la transparencia en el proceso abierto relacionado con el Máster Universitario en Derecho Público del Estado Autonómico", en referencia a los estudios cursados por la dirigente madrileña.
En la misiva, fechada este miércoles, 28 de marzo, el rector recuerda que hace una semana ordenó a la jefe de Inspección de Servicios iniciar un procedimiento de información reservada en relación con este máster "con el fin de aclarar posibles errores o irregularidades y determinar, en su caso, las responsabilidades que pudieran derivarse".
"Repercusión social"
El rector de la URJC, "dada la repercusión social" del caso en cuestión y con el "objetivo de promover al máximo la transparencia" en el proceso, defiende así como "oportuno" que designe un jefe o jefa de Inspección de Servicios de una de las universidades que forman parte de la CRUE "para que actúe como observador externo".
La CRUE ya ha replicado que el próximo martes 3 de abril se conocerá el nombre de la persona designada para desempeñar la citada labor de observación.
La solicitud, según recoge la misiva del rector, se produce al amparo del Reglamento del Régimen Interno del Grupo de Trabajo de Inspección de Servicios, donde se recoge como objetivos de dicho grupo "fomentar la colaboración entre las distintas Inspecciones de Servicios Existentes en las Universidades y promover que la rendición de cuentas sea implantada en la cultura del sistema universitario español en cumplimiento del principio de transparencia".
El rector pretende así "ratificar" su "firme compromiso y el de la comunidad universitaria que conforma la URJC de actuar con absoluto rigor y máxima transparencia".