Según el documental, se sugiere que hubo barcos rusos presentes antes de la explosión del Nord Stream, aunque no se sabe con certeza lo que ocurrió exactamente.
Dos gasoductos Nord Stream que llevan gas de Rusia a Europa a través del mar Báltico, se encuentran fuera de servicio debido a explosiones submarinas. Aunque se han propuesto varias teorías sobre la causa de las explosiones, algunas culpando a Rusia y otras sugiriendo que fue Occidente o Ucrania, todavía no se sabe lo que realmente sucedió.
En un capítulo reciente de la serie "La guerra en la sombra de Putin" se menciona que buques rusos realizaron movimientos sospechosos cerca del lugar de la explosión, lo que podría indicar operaciones submarinas.
El documental televisivo producido por canales de televisión de los países nórdicos no acusa directamente a Moscú de estar detrás de la explosión, pero sí cuestiona la actividad inusual de su armada.
Según el informe, los "barcos fantasma" rusos, incluyendo un barco de investigación, un remolcador y otro buque de guerra, estuvieron en el área de la explosión durante varias horas.
Un exoficial de inteligencia naval británico, que anteriormente desempeñaba su trabajo en la interceptación de la Flota Rusa del Báltico, localizó su ubicación gracias a datos obtenidos de fuentes públicas y comunicaciones por radio.
En relación con las explosiones del Nord Stream, Occidente acusa a Rusia, pero el gobierno de Moscú lo niega y no se ha demostrado su implicación.
El gobierno ruso, por otra parte, ha acusado al Reino Unido de ser responsable de las explosiones que destruyeron una importante parte de la infraestructura energética del Kremlin, la cual le otorgaba influencia sobre Europa, en especial sobre Alemania, un país que depende en gran medida del gas. Sin embargo, el gobierno británico ha negado estas acusaciones y las ha tachado de falsas.
Según informes recientes, los agentes proucranianos fueron los responsables, pero no se menciona que el gobierno ucraniano estuviera involucrado.
El periodista de investigación, Håvard Gulldahl, ha afirmado que han sido honestos en cuanto a su trabajo y conclusiones, incluso sobre lo que no pudieron determinar. El documental examinó minuciosamente las actividades de los buques rusos antes del accidente.
Se piensa que el barco llamado Sibiryakov tiene la capacidad de llevar a cabo labores de vigilancia y mapeo submarino, además de poder desplegar un pequeño vehículo submarino.
De acuerdo con un oficial de la Royal Navy que se mantuvo en el anonimato en el documental, el barco cambió sus comunicaciones a un receptor secreto y tomó una ruta inusual cerca del lugar donde más tarde explotaría el oleoducto en junio.
Suecia ha confirmado que se produjo un sabotaje en los gasoductos Nord Stream después de encontrar restos de explosivos.
Según una investigación, un grupo proucraniano es señalado como responsable del ataque a los gasoductos Nord Stream.
Según las comunicaciones por radio, el remolcador naval SB-123 llegó cinco días antes de las explosiones de septiembre y se quedó allí toda la noche antes de regresar a Rusia.
En el mes de abril, se informó que las emisoras danesas DR, noruegas NRK, suecas SVT y finlandesas Yle habían descubierto que buques rusos estaban mapeando parques eólicos marinos, gasoductos, cables eléctricos y de Internet en el Mar del Norte con el propósito de posibles ataques de sabotaje.
El objetivo de algunos parques eólicos frente a las costas de Gran Bretaña fue afectado por una explosión en las zonas económicas de Suecia y Dinamarca. Ambos países afirman que la explosión fue deliberada, pero aún no se sabe quién es el responsable. Alemania también está investigando el incidente. La fuga de gas causó una gran emisión de gases de efecto invernadero, calculada en 500 toneladas métricas de metano por hora.