Más de 200 agresores sexuales han visto reducida su condena en España y 18 han sido liberados antes de lo previsto desde que la controvertida ley del 'solo sí es sí' entró en vigor el 7 de octubre. A pesar de las solicitudes de la oposición para que el gobierno modifique la ley, el Ministerio de Igualdad ha rechazado esta opción y decidió ofrecer a las víctimas de violencia sexual afectadas por las rebajas y excarcelaciones, las conocidas como pulseras contra el maltrato.
El ministerio ya ha empezado a implementar estas pulseras telemáticas para los agresores sexuales después de que el gobierno español ordenara ampliar su uso. Estas pulseras solo estaban disponibles para víctimas de violencia de género, limitado a agresiones dentro de una relación. La delegada del Gobierno contra la violencia de género, Victoria Rosell, anunció esta semana durante la presentación de la Estrategia Estatal para combatir las violencias machistas 2022-2025 que las víctimas podrían tener acceso a estas pulseras en 24 horas tras recibir una orden judicial.
El fiscal de sala de violencia, Teresa Peramato, envió un oficio a todas las fiscalías al final del mes pasado para informarles sobre esto. Rosell dijo el 17 de enero que no se había recibido ninguna petición judicial para instalar estos dispositivos. Sin embargo, este miércoles afirmó que ya se habían instalado algunos, sin poder especificar cuántos ni dónde exactamente para proteger a las víctimas. Según Rosell, salvo casos excepcionales, las condenas por agresión sexual no se podrán reducir hasta que los agresores lleven estas pulseras. Esto significa que, aunque un agresor reciba una condena menor de la prevista, no podrá salir de prisión hasta que lleve la pulsera. La intención es que los agresores sean controlados y vigilados para evitar nuevos delitos.