La Agencia Europea de Medicamentos ha autorizado el uso de las vacunas adaptadas a las nuevas variantes del virus desarrolladas por las farmacéuticas Pfizer y Moderna como refuerzo para una protección más amplia contra la COVID-19 en personas mayores de 12 años. Las nuevas inyecciones podrían administrarse al menos 3 meses después de la última dosis recibida. La mayoría de los países europeos temen una nueva ola de contagios en otoño, y por ello quieren reforzar con una nueva dosis la inmunidad de la población, especialmente la de las personas más vulnerables y los ancianos.
Según ha informado la agencia, los estudios han demostrado que pueden desencadenar fuertes respuestas inmunitarias contra Omicron BA.1 y la cepa SARS-CoV-2 original en personas previamente vacunadas. En particular, fueron más eficaces para desencadenar respuestas inmunitarias contra la subvariante BA.1 que las vacunas originales. Los efectos secundarios observados con las vacunas adaptadas fueron comparables a los observados con las originales y, por lo general, leves y de corta duración. Los dos dictámenes del CHMP se enviarán ahora a la Comisión Europea, que adoptará una decisión final.