Existe un proyecto de danza para el Parkinson bautizado como Danza-T. Su finalidad es motivar a los enfermos a buscar apoyo mediante este arte. Ciento veinte comunidades de dieciséis países participan en el programa. Hoy han acudido a la sede del Ballet Nacional personas de Móstoles, Alcorcón y otras localidades madrileñas, con la coordinación de César Casares.
En el encuentro han participado el director de la compañía, Antonio Najarro, y la primera bailarina Inma Salomón, además de otros integrantes del Ballet. Todos ellos han sido los encargados de guiar y actuar con la veintena de enfermos de distintas edades que han querido participar en la experiencia.
Inma Salomón ha dirigido en primer lugar una clase de calentamiento, acorde con la capacidad física de los invitados. Seguidamente Antonio Najarro les ha enseñado una parte de la coreografía de ‘Alento’, en el repertorio del ballet. Bailarines profesionales y las personas participantes en Danza-T han ensayado un fragmento de esta pieza.
El Ballet Nacional de España, con este encuentro continúa su trayectoria de acercar la danza española a nuevos públicos y espacios, manteniendo su compromiso con la sociedad y los colectivos vulnerables, siendo un género de danza especialmente útil para ello debido a su ritmo muy marcado y a su expresividad. En esta jornada concretamente objetivo que se perseguía era la normalización, socialización y visibilidad e esta enfermedad. Y se ha conseguido.